tag:blogger.com,1999:blog-323172542024-03-05T10:18:12.414+01:00Diario de un fisioterapeutaUn blog de Fisioterapia Sin Red #FSR por Vicente Lloretvillovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.comBlogger76125tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-86784929599044203932012-08-26T21:47:00.002+02:002012-08-27T01:17:38.689+02:00Nos mudamos<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhFBFhoKZcnVbpUx6mYKABNAn0o_ASiOaZm-VEAB8221SjTKM0o4Ny0DnPicGgvyDW1uPx8T698_C34TIKEXuC0bGmrK8SkPgEhjdLrpOkVmcjhV64Vz55Mjm1Ok3B6ozk-opnY/s1600/cerrado.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 276px; height: 273px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhFBFhoKZcnVbpUx6mYKABNAn0o_ASiOaZm-VEAB8221SjTKM0o4Ny0DnPicGgvyDW1uPx8T698_C34TIKEXuC0bGmrK8SkPgEhjdLrpOkVmcjhV64Vz55Mjm1Ok3B6ozk-opnY/s320/cerrado.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5781124968576091026" border="0" /></a><br /><br />Acaba mi andadura en blogspot para seguir reflexionando en voz alta en wordpress. Después de seis años en esta plataforma me mudo a otra dirección como parte del equipo de #FSR lleno de proyectos, ilusiones y ganas de progresar.<br /><br />A partir de ahora aqui encontraréis el blog en esta nueva dirección:<br /><br /><a href="http://vicentelloret.fisioterapiasinred.com/">http://vicentelloret.fisioterapiasinred.com/</a><br /><br />Espero seguir recibiendo vuestras visitas y comentarios en el nuevo sitio. Os espero.<br /><br />Un abrazo.<br /><br />Vicente.<br /><div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-83944866543862120192012-07-24T17:38:00.001+02:002012-07-24T17:40:19.541+02:00Errare humanun est... o "que vamos, que la he líao parda"<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBH-FuPe3djDEv6h__gmHWgVTw4OnxYvYv72Fbf-6-9gqstfEZOTu_gPjM4jNyG-_Jdw-tl9fUBh89N_1bEO5X9Ki7180greI9HFx0WHq3-8527T949sOjJLzos4G_bjK1AwwE/s1600/404-error.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="306" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBH-FuPe3djDEv6h__gmHWgVTw4OnxYvYv72Fbf-6-9gqstfEZOTu_gPjM4jNyG-_Jdw-tl9fUBh89N_1bEO5X9Ki7180greI9HFx0WHq3-8527T949sOjJLzos4G_bjK1AwwE/s320/404-error.png" width="320" /></a></div>
Esta bien cometer errores. Quiere decir que todavía hay mucho que aprender. Nos hace ser humildes. Nos obliga a no bajar la guardia. Nos enseña lecciones que difícilmente olvidamos. <br />
<br />
Yo odio equivocarme. Acepto bien las críticas pero no me gusta fallar. Cada caso clínico es una especie rompecabezas, un desafío. No es necesario que nadie venga a decirme que lo importante es la persona y bla, bla. Soy muy consciente que cuando alguien viene a pedir mi ayuda lo hace en calidad de paciente que padece. Y la parte que más me renta de mi trabajo es la de la persona agradecida. El ex-padeciente que vuelve en calidad de amigo a verme para tomar algo.<br />
<br />
Por eso no me gusta cometer errores. Lo primero que quiero cuando viene un paciente es saber si va a beneficiarse de mi tratamiento. ¿Es un paciente para mi? Muchas dudas en este aspecto. Cuando comenzó a surgir “la ola” del aspecto biopsicosocial y el dolor crónico siempre tuve dudas respecto a lo mucho o poco que podía hacer la fisioterapia al respecto. Sigo sin tenerlo claro, pero sí he aprendido muchas cosas por el camino.<br />
<br />
Hace tiempo vino a verme una paciente con dolor cervical. Tenía un dolor (1) en zona de la línea curva occipital inferior derecha, que en ocasiones irradiaba a (2) zona trapecio superior bilateral y (3) zona periescapular izquierda (especialmente borde interno y ángulo inferior). Cuando (1) aumentaba, tenía un fuerte dolor de cabeza hemicraneal derecho además de náuseas y vómitos. La paciente recibió tratamiento fisioterápico que consistió en movilizar la zona cervical inferior (que contribuía poco al movimiento), tratamiento con punción seca para el dolor (2) y (3) tratando trapecio superior, medio e inferior y luego reentrenamiento de la cintura escapular.<br />
<br />
Parece que al principio mejoró bastante pero el efecto del tratamiento duraba muy poco. Es decir, los síntomas prácticamente desaparecían pero durante el mismo día y el día siguiente. En cuanto volvía al trabajo (administrativa) reaparecían los síntomas con la misma intensidad. El tratamiento empezó a alargarse más de lo previsto y parece que el componente mecánico no era muy claro. No estaba clara la correlación signos-síntomas con posturas y movimientos concretos. <br />
Y este es el error al que me refería. Hubo un tiempo en que cuando un paciente venía con un dolor difuso en la rodilla “intentaba” casarlo con una alteración femoropatelar. Mi subjetividad clínica se enturbiaba intentado sentirme cómodo en mi campo. ¿Qué es lo que mejor se me da en el dolor de rodilla? Pues a por ello. Cuando amplié conocimientos en la relevancia del conjunto del miembro inferior en el dolor de rodilla, entonces podía ser más objetivo a la hora de trivializar la relevancia de la cadera, tobillo o de la propia articulación patelofemoral.<br />
Con el dolor crónico en mi caso ha sucedido algo similar. Cuando algo a nivel clínico no ha evolucionado de la manera prevista, el trabajo de reentrenamiento funcional ha sido positivo. Algo así como un “comodín”. Al fin y al cabo de lo que se trataba era de fomentar el movimiento, la actividad, en un entorno controlado, quitando miedos, especialmente la kinesiofobia. ¿A quién no iba a sentarle bien? Y muchos pacientes han respondido muy positivamente, lo que a nivel de feedback todavía me permite cometer más errores.<br />
<br />
Pues bien, como esta paciente no estaba respondiendo como esperaba al tratamiento en consulta decidimos probar a trabajar con ella desde otra perspectiva. Iniciamos el tratamiento que siempre apoyamos de manera progresiva en “pedagogía”. Estuvimos explicándole qué era el dolor, por qué se produce... intentado que entendiera que no hay una causa mecánica subyacente a su dolor y que por tanto nuestro trabajo no iba a centrarse en eso. Y lo entendió. Ató cabos y comprendió de qué forma había estado contribuyendo a agravar algo que inicialmente era una leve molestia en el cuello y que hoy por hoy no le permitía trabajar de manera prolongada.<br />
<br />
Y vino a verme hace muy poquito contándome lo poco que había progresado en el aspecto funcional. Había entendido perfectamente lo que le contamos. De hecho me lo relataba con bastante precisión mientras mantenía una horrible postura sentada en la camilla. Al corregirle la posición de la cabeza... los síntomas más distales prácticamente desaparecían y los proximales disminuían. Espera un momento... modifico su postura a una exageradamente peor, donde su cabeza va en protracción y, ¡voilà! la intensidad del dolor aumenta y produce dolor en la cabeza... <br />
<br />
Vengo de hacer un curso de diagnóstico y terapia mecánica. El objetivo de mi sesión consistía en subclasificar el cuadro clínico que presentaba (que seguía presentando) mi paciente. ¿Que no hay componente mecánico?... obviamente tengo que pedirle perdón. El manejo del caso no fue el correcto. En una sola sesión los síntomas se centralizan. Cuando vuelve la segunda relata una mejoría de un 80%.<br />
<br />
¿Cómo se descarta una disfunción relevante? Descartando el componente mecánico. Aquí creo que viene el “quid del asunto”. Yo estoy convencido que en Australia, cuando un paciente acude remitido a un centro especializado en el abordaje de pacientes con dolor crónico, lo hace habiendo descartado que exista una alteración patomecánica subyacente. No es el caso en nuestro país. Aquí la fisioterapia tiene muchísimo que aprender. No sabemos descartar correctamente la implicación mecánica en una cefalea (no todos cuando acabamos la carrera, vamos). Muchas de las formaciones que son parte del pilar formativo básico de un fisioterapeuta australiano no llegan poco a poco a modo de postgrado muy caro y que no todo el mundo puede hacer. <br />
<br />
Tendemos a construir la casa por el tejado. A empezar el libro por el final. Hay mucho que caminar antes de creer que cruzamos la meta. Nuestra profesión, muy joven todavía, tiene mucho que aprender. Hagámoslo en el orden adecuado y aprendamos de nuestros errores (y del de los compañeros que los asumen y comparten).<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-71467233051622145722012-05-22T19:03:00.002+02:002012-05-22T19:03:19.789+02:00Sentido crítico 2.0<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhscYwFM_NojhMZ-Ok-bQwyLR8TZCWavhWaIGwoOsXY8sKqdACCwAv1zZhGWbhLus_p2QI-OBaVURwKrCGseHjIBy3m0Vlmkaa_E47qkToqe6Lg8Ng0WKjVt22pGQOj7GSmGUxH/s1600/inteligencia+colectiva.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhscYwFM_NojhMZ-Ok-bQwyLR8TZCWavhWaIGwoOsXY8sKqdACCwAv1zZhGWbhLus_p2QI-OBaVURwKrCGseHjIBy3m0Vlmkaa_E47qkToqe6Lg8Ng0WKjVt22pGQOj7GSmGUxH/s320/inteligencia+colectiva.JPG" width="320" /></a></div>
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El otro día se le cayó un diente a mi sobrina. El ratoncito
Pérez hizo acto de presencia y le dejó en
la mesita de noche un paquete perfectamente envuelto. Cuando lo abrió
descubrió en su interior una construcción de <a href="http://www.playmobil.es/" target="_blank">Playmobil</a> (le encanta). La niña
estaba tan ilusionada como perpleja. ¿Cómo había podido un ratón, ya no subir
una caja que le superaba con creces en tamaño y peso, si no… cómo había podido
un ratón envolver su regalo? Pasó el día sorprendida por el hecho. La <b>inocencia
</b>de los “cachorros humanos” es adorable puertas afuera. La falta de sentido
crítico que irá madurándose con la incorporación de experiencias, información.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Mi gran amigo Eduardo siempre ha dicho que el fisioterapeuta
español tiene el <b>sentido crítico de un niño de 2 años</b>. Y eso es así. Nos
limitamos a “asumir” como verdaderos los conocimientos que se nos presentan en
un congreso por el hecho de que el ponente tiene cierto nombre, ha escrito un
libro o simplemente tiene pinta de saber mucho. Nos han colado técnicas y
conceptos, libros y artículos porque no tenemos capacidad de discriminar el
grano de la paja. Y esta muy bien el cambio de paradigma donde estamos pasando
de un “absolutamente todo vale” a un acercamiento al “basado en la evidencia”.</div>
<div class="MsoNormal">
Muchos frentes todavía están muy verdes. Abogo firmemente
por el <b>cambio de paradigma</b> en la definición de fisioterapia donde se cambie el
término “agentes físicos” como núcleo de la misma por el de “<b>movimiento</b>”. E
hilando más fino iría más encaminado a la acepción del término que emplea el <a href="http://arturogoicoechea.wordpress.com/" target="_blank">Dr.Goicoechea</a> cuando se refiere a “<b>acción</b>” en lugar de movimiento: “movimiento
intencionado”. Este debe ser uno de nuestros elementos diferenciadores.
Entiendo que las peleas eternas entre independentistas y papá Estado son una
forma de entretenimiento para algunos y una cuestión de religión para otros.
Fisioterapia y osteopatía viven un conflicto eterno que responde
mayoritariamente a intereses crematísticos (me encanta esa palabra…). Esta
situación ha venido favorecida precisamente por esa<b> falta de sentido crítico</b>
que ha diezmado nuestra identidad durante mucho tiempo. Pero ahora ya no hay
vuelta atrás.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Los pilares de nuestra profesión, los puntales filosóficos,
los principios teóricos, las bases de lo que nos define son susceptibles a revisión
y mejora y entre todos podemos intentar mejorar todo lo que tiene relación con
la fisioterapia. Creo que iniciativas como la del señor Eduardo Fondevila en su
<a href="http://desdeoceanomar.wordpress.com/" target="_blank">blog</a> han demostrado que entre todos podemos hacer que esto avance. Nosotros,
los fisioterapeutas, somos los mejores representantes de la fisioterapia en
España. Intentemos sumar, entre todos, en pro de la <b>inteligencia colectiva</b>.
Todos tenemos voz y voto. Empleémoslo para que la profesión crezca. <a href="http://manel-domingo.blogspot.com.es/" target="_blank">ManelDomingo</a> nos ha demostrado que con ganas y esfuerzo es posible <b>ser partícipe del
cambio</b>. Los colegios deben ser una herramienta que trabaje por la fisioterapia
y el fisioterapeuta y de no ser así tenemos que hacer porque la situación
cambie. De manera activa. Como conjunto.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Sigo pensando que<b> nuestro talón de Aquiles es la formación</b>.
Necesitamos ahondar en muchos aspectos que no solo nos harán crecer como
profesionales si no que además nos aportaran ese espíritu crítico del que hablo,
que nos permitirá desterrar, por cuestión de lógica, todo lo perteneciente al
mundo de lo para-sanitario, lo pseudo-científico, en pro de la ciencia, nuestra parcela de conocimiento.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Iniciativas varias como <a href="http://www.fisioterapiasinred.com/" target="_blank">FSR</a> pretenden convertir esto que
hace poco tiempo era casi una utopía (se me ha tachado de utópico tantísimas
veces en <a href="http://www.fisionet.net/" target="_blank">fisionet</a>…). Atentos a sus pantallas porque la cosa pinta muy bien y
sed todos bienvenidos a la iniciativa de la inteligencia colectiva. Tu participación comentando, cuestionando, preguntando, compartiendo <b>nos hace crecer a todos</b>. Un saludo.</div><div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-1827071437706808382012-05-08T00:26:00.000+02:002012-05-08T00:30:56.197+02:00Reflexiones en tiempo de cambio. Hora de actuar.<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjzZaecjiLz-n52NQW84qs67lIl36W36PSb5NLd_WNpNrOHJzcglBVg6LQd5ThfXN4WTVWb2ZDF9edrrrOBWY_b0hljLtMWMwgTl802sFFJUMHOBZ348x1XC6t-im8BegfU7DX_/s1600/pun%25CC%2583o.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjzZaecjiLz-n52NQW84qs67lIl36W36PSb5NLd_WNpNrOHJzcglBVg6LQd5ThfXN4WTVWb2ZDF9edrrrOBWY_b0hljLtMWMwgTl802sFFJUMHOBZ348x1XC6t-im8BegfU7DX_/s320/pun%25CC%2583o.jpg" width="318" /></a></div>
<br />
Los periodos de ausencia en el blog vienen dados por largas temporadas de reflexión. La fisioterapia esta de cambio y es necesario de vez en cuando dedicar algo de tiempo en meditar al respecto. Quiero aprovechar la buena onda post jornadas 2.0 organizadas por el Colegio de Fisioterapeutas de Cataluña (a la que felicito desde aquí. Mi más sincera admiración por la motivación que inspira) a las que asistí este fin de semana y me han servido para reforzar muchas de las ideas que llevaba tiempo madurando.<br />
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Pasamos mucho tiempo debatiendo sobre el sexo de los ángeles. Es necesario llegar a conclusiones respecto a nuestro paradigma para poder delimitar nuestro campo de actuación, dejar claro qué somos y qué hacemos y finalmente demostrar nuestra valía al resto de profesionales sanitarios y a la población en general. En definitiva, dignificar nuestra profesión.<br />
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El primer punto del que debemos partir es el de la calidad. Debemos exudar calidad. La actuación fisioterápica debe ser una actuación regida por la calidad. Nadie debe poner en tela de juicio nuestro trabajo porque nosotros lo habremos hecho antes y habremos desterrado aquello que no ha demostrado una eficacia clínica y no ha tenido un respaldo científico. Es hora de aplicar realmente la fisioterapia informada en la evidencia.<br />
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En España estamos a años luz del desarrollo en el ámbito de la investigación en fisioterapia que sí hay en otros países. Lo poco que se esta llevando a cabo tiene poca o nula correlación con la realidad del clínico y esto es así porque en nuestro país el investigador suele ser un fisioterapeuta orientado a la docencia que normalmente no ha ejercido previamente como clínico. Tuvimos una muestra de ello en las jornadas que organizó el Ilustre Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Andalucía (al que también aprovecho para felicitar por la gran iniciativa y el elenco de ponentes a los que trajo entre los que obviamente destacó Shirley Sahrmann).
Tenemos que saber interpretar la evidencia.<br />
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Tenemos que aprender a manejar la información disponible. Las guías clínicas, las revistas científicas... aprender a usar internet en nuestro beneficio. Y tenemos que adquirir el espíritu crítico que como profesionales sanitarios en el marco científico deberíamos tener. No podemos seguir dejando que, como dijo Eduardo Fondevila, fisioterapia sea todo menos fisioterapia.<br />
<br />
¿Y cual es en gran medida parte del problema? La burbuja formativa. Vivimos en un tiempo en el que la formación es un negocio rentable. Las universidades en primer lugar y los centros privados en último, han sabido aprovechar las carencias formativas que padece el fisioterapeuta ofertándole una ilimitada carta de cursos la mayoría de los cuales son francamente muy poco recomendables (basura, vamos...)<br />
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Y es que muchas instituciones (universidades, colegios profesionales, empresas...) tienen intereses en la desinformación. Siempre que hablamos de falta de criterio en fisioterapia, de la falta de unidad, de la ausencia de un lenguaje común, que no os engañen: se debe a intereses crematísticos. A la pela. Esto es como lo de los partidos políticos, las cajas de ahorro y las inmobiliarias de <a href="http://www.youtube.com/watch?v=TfRSfF296js">“Simiocracia”</a>. Aquí hay un problema de bolsillo que lastra que avancemos como colectivo.<br />
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Podemos tratar de eternizar discursiones sobre si la osteopatía es fisioterapia, que si el tratamiento de agentes físicos incluye el telescopaje de la fascia, que si hay evidencia científica suficiente que respalde la aplicación de la terapia craneosacra... o podemos mirar ahí fuera y considerar el “consenso planterario” y decidir quitarnos las <a href="http://buscon.rae.es/draeI/SrvltConsulta?TIPO_BUS=3&LEMA=anteojera">anteojeras</a>. Caerían grandes monopolios formativos pero avanzaríamos como profesión desterrando viejas anclas que hoy solo lastran nuestro progreso.<br />
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Creo que llega el momento de darle una vuelta de tuerca. Estamos viviendo una revolución con la redes sociales y el 2.0. La era de la inteligencia colectiva. ¿Por qué no intentar mejorar entre todos lo que creemos que es mejorable? Yo estoy dispuesto a dar un primer paso desde aquí. Si realmente parte de la culpa de nuestra situación viene favorecida por la falta de sentido crítico que tenemos los fisioterapeutas (especialmente recién terminada la carrera), si tenemos dificultades para acceder al mercado formativo por no poder entrar en el mercado laboral precisamente por no haber accedido previamente al mercado formativo... “innovemos”.<br />
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<a href="http://www.blogger.com/www.fisioterapiasinred.com">FSR</a> parte del mismo objetivo que cada uno de sus componentes: dignificar la profesión. Vamos a luchar por ello. Desde este humilde blog voy a iniciar una sección de videoblogs con la intención de ayudar al recién diplomado o graduado en su camino. El diario de un fisioterapeuta ahora será también un punto de partida para quien quiera tener un criterio suficiente para poder saber qué es fisioterapia y qué no lo es y por dónde puede empezar. Hagamos un diario de la fisioterapia conjunto: Inteligencia colectiva (espero vuestras aportaciones. Esta semana intentaré subir la primera).<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com34tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-44916789293984560932012-04-11T11:20:00.003+02:002012-04-11T11:27:22.522+02:00Consejos gratuitos varios<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhzkml-8ngrpH2Y_H_TBcsi3aez3YbLX1xy0mxOHUdhfyCVCyPiFZA97bgTpGaJHRXf4GqdcoUdWNeYOSj2lOrl-o7sUpKa0kCFG6xkw4bPgEy9Z-6pEVdBeaIZFNPQDWac9XRi/s1600/conde.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 300px; height: 190px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhzkml-8ngrpH2Y_H_TBcsi3aez3YbLX1xy0mxOHUdhfyCVCyPiFZA97bgTpGaJHRXf4GqdcoUdWNeYOSj2lOrl-o7sUpKa0kCFG6xkw4bPgEy9Z-6pEVdBeaIZFNPQDWac9XRi/s320/conde.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5730070888269701570" /></a><br />¿Imagina que su primo, peón de obra de toda la vida del Señor, se anima a proyectarle los las planos de la vivienda con la que siempre había soñado? ¿O que su vecina, la cardiópata, le propone intervenirle a corazón abierto? No suena muy coherente… pero cuando hablamos del ámbito deportivo, esto suena menos “tonto”.<br /><br />“Mi vecino tiene un primo que competía en atletismo y me ha diseñado un plan de entrenamiento”. La frase del “preparador” me toca bastante la moral. Y lo hace porque me concierne directamente, primero porque como fisioterapeuta tengo una especie de odio visceral hacia el intrusismo profesional y porque como tengo el placer de trabajar codo con codo con un licenciado en educación física, se de primera mano de qué hablo.<br /><br />¿Qué pasa en España? Parece que el respeto profesional es ya una leyenda. Lo mismo da que el señor que nos atiende tenga más o menos estudios. ¿Carrera, máster, doctorado? ¿Para qué? Hay monitores que en un fin de semana obtienen un “título” a distancia. Ayer precisamente leía a Carlos López Cubas poniendo un enlace a un centro que ofertaba el título de “técnico en fisioterapia deportiva”. ¿Pero esto qué es?<br /><br />La gente asocia de manera errónea calidad-precio del mismo modo que asocia incorrectamente experiencia-calidad. “Llevo desde que tengo cinco años entrenando baloncesto… a mi nadie me va a contar ahora algo que no sepa…” Me encanta la humildad del personal… Pero llevado al absurdo sería como si yo me considerara un experto en artes marciales por el hecho de haber recibido más de 17 palizas… ¿Todo buen futbolista es un buen entrenador? ¿Todo buen clínico es un buen docente? No lo creo.<br /><br />La fisioterapeuta es una profesión que intenta hacerse un hueco en el marco sanitario para dejar de ser considerado un mero técnico y ocupar su parcela específica en el diagnóstico y tratamiento de las alteraciones del movimiento como el especialista en dicho ámbito. Y debemos dar las gracias a las generaciones anteriores que estuvieron tirando del carro para conseguir lo que consiguieron. Tenemos nosotros la obligación de coger el testigo y seguir peleando por llegar a meta. Los licenciados en educación física tienen también esa asignatura pendiente. Deben ocupar su sitio y hacerse respetar porque el intrusismo en su ámbito de trabajo pesa más todavía que en el nuestro. Y si todo el mundo sabe de salud de actividad física y deporte mejor no hablamos. <br /><br />¿Alguna vez un paciente/cliente os ha intentado dar una lección? Espero sus aportaciones en los comentarios. Un saludo.<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-12076860331245782352012-03-17T13:00:00.002+01:002012-03-17T13:11:20.075+01:00Divagaciones varias sobre dolor y fisioterapia<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh0ZT6_nvaj_aCh19k1G9IYXjpB9bZqGbASOczLWD67veHh4A6WzZ_QOv3ObbAVhRmynS-2c6u6rlZ6zyu33mkVgLlZiZNHL8k0UIy-mD5fJ8iuCE1OuLl9aIURTr8xHK8SwJq7/s1600/el-pensador-de-rodin.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 255px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh0ZT6_nvaj_aCh19k1G9IYXjpB9bZqGbASOczLWD67veHh4A6WzZ_QOv3ObbAVhRmynS-2c6u6rlZ6zyu33mkVgLlZiZNHL8k0UIy-mD5fJ8iuCE1OuLl9aIURTr8xHK8SwJq7/s320/el-pensador-de-rodin.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5720837485685020402" /></a><br />Llevo tiempo de reflexión. Muchos conceptos, muchas ideas, mucho por contextualizar. En mi cabeza los conceptos se ordenan como rompecabezas tridimensionales que necesitan unos buenos cimientos sobre los que poder construir. Durante mi formación me ha preocupado mucho la falta de un paradigma, la fragilidad de la identidad del fisioterapeuta. Como profesión joven buscamos nuestro sitio y nos “rebelamos” de cuando en cuando, a veces con motivo, otras sin demasiada razón.<br /><br />Vivimos una especie de ola/corriente/moda centrada en el DOLOR. Y tiene todo el sentido del mundo puesto que la gran mayoría de pacientes que acude a visitarnos suelen presentar dolor. Nuestros modelos asistenciales bebían de la traumatología y ortopedia y entendían que todo dolor, en mayor o menor medida, va asociado a un daño tisular. Por tanto ante un episodio de dolor articular o muscular, por ejemplo, debíamos analizar las articulaciones y músculos relacionados con el área dolorosa para encontrar al posible “culpable” (o “víctima” según se mire...).<br /><br />Y no es que esto haya dejado de ser cierto. Parece que ahora esta mal visto eso del “estructuralismo”. La nocicepción es un proceso neuronal. Esta claro que hay vida más allá de los sistemas “abajo-arriba”, pero estos no han dejado de sernos útiles. No debemos obviarlos. Además, para mas inri, el dolor no tiene porque ir solamente asociado a la consumación de daño, si no que en movimiento disfuncional dicha alteración puede desencadenar la percepción dolorosa. Si el movimiento de elevación de hombro va asociado a un patrón aberrante es motivo suficiente para que dicho movimiento, pese a que no produce lesión tisular per se, sea interpretado como potencialmente lesivo y por tanto vaya acompañado de dolor (además de otros componentes integrados en el programa dolor).<br /><br />Es decir, que tenemos por un lado la lesión consumada y por otro la lesión potencial. Los habituales del blog de Arturo Goicoechea han leído ya sobre el cerebro bayesiano. Nuestra realidad no se presenta frente a nosotros y es captada por lo sentidos. La realidad se construye en nuestro cerebro uniendo estímulos exteriores y procesos probabilísticos de cómo interpretamos el mundo. La “alucinación” de lo real. Por tanto hay muchas variables a la hora de intentar considerar cual puede ser el origen de un dolor en un segmento corporal concreto (pese a que sabemos que dicha modulación y presentación al plano consciente son procesos neurológicos).<br /><br />Los fisioterapeutas hemos sido grandes temerosos de los mecanismos inflamatorios asociados al proceso de reparación del tejido lesionado. Pensábamos que el proceso inflamatorio esta muy mal mediado y que el cuerpo necesitaba de nuestras aplicaciones físicas (véase crioterapia, por ejemplo) para poder contenerlo y evitar más daño del ocasionado por el mecanismo lesional en sí. Parece ser que el objetivo principal a la hora de aplicar crioterapia es más el intentar prevenir los daños asociados a la hipoxia tisular secundaria a la lesión que el mediar en el componente inflamatorio. Nos fiamos del cuerpo. Vamos a dar por hecho que su función se ejecuta de manera precisa y correcta. ¿Por qué no nos fiamos del procesado relacionado con la génesis del dolor?<br /><br />Somos seres conscientes. No sabemos muy bien por qué pero en un momento determinado unas células incoscientes crearon unos circuitos neuronales que nos dotaron de conciencia. Asociamos nuestro yo a ese área, pero son muy pocos los procesos que vuelcan la información allí. No somos capaces de determinar la cantidad de luz que tenemos frente a nosotros pese a que nuestras pupilas son capaces de adaptarse a las necesidades fotónicas de la retina ya que dicho proceso no tiene relación con los procesos conscientes y por tanto no disponemos de dicha información. Pero la experiencia dolorosa sí se proyecta al plano consciente. Previamente ha sido filtrada por una serie procesos tales como el contexto, la memoria, la cultura... por tanto el dolor es modulable puesto que según el trasfondo la interpretación que hacemos del mismo es una u otra.<br /><br />El dolor es un mecanismo de supervivencia cuya principal función es la de protegernos de los peligros potenciales que pueden atentar con nuestra integridad y por tanto pueden ocasionarnos la muerte como individuos. Es un sistema defensivo que se compone de la suma de varios circuitos periféricos y centrales. Cuando se activa existe un proceso por el cual el sistema se sensibiliza en la periferia y a nivel central. Dicha sensibilización es normal y remite cuando finaliza el proceso.<br /><br />Parece ser que nuestra concepción anatomofisiológica del sistema nervioso debe ser sometida a revisión. Las neuronas transmiten información en dos sentidos. Nuestro sistema nervioso central puede desencadenar un proceso de inflamación neurógena a nivel periférico. Del mismo modo que un estímulo periférico puede iniciar una cascada química que finaliza con un “procesado” central este fenómeno puede darse a la inversa.<br />Como siempre la medicina avanza gracias al estudio y comprensión de patologías concretas. El miembro fantasma, la algodistrofia-simpatico-refleja o el dolor regional complejo tipo II, la fibromialgia, la migraña...<br /><br />Somos conocedores de que la medicina debe adaptarse a la situación personal de cada enfermo. Existe un grupo de pacientes con unas necesidades especiales puesto que el proceso de sensibilización central no ha remitido una vez ha finalizado el proceso de regeneración. Es decir, el daño o la disfunción han sido reparados pero sigue existiendo dolor. El dolor no asociado a daño o disfunción relevante. Este tipo de pacientes suponen un verdadero desafío a la concepción clásica de la medicina tradicional. Es el momento de integrar el rol de la red neuronal, donde el sistema arriba-abajo será el protagonista indiscutible de nuestro cuadro.<br /><br />¿Esta mal mediada la sensibilización? ¿Son todos los pacientes potenciales candidatos a padecer una sensibilización central más allá del proceso lesional? Parece que uno de nuestro cometidos debe ser el de identificar factores de riesgo. Debemos tratar de prevenir la aparición de dicho proceso puesto que sabemos lo difícil que es manejarlo una vez se ha “cronificado”.<br /><br />Todos hemos tenido en consulta un paciente con un dolor de demasiado tiempo de evolución. “Llevo 6 años con dolor lumbar, que me limita a la hora de realizar mis actividades de la vida diaria. Ya no puedo hacer deporte. Apenas puedo trabajar...”. Y muchos no responden correctamente a los tratamientos “periferalistas” pero muchos otros sí lo hacen. ¿Cuándo debemos descartar un abordaje manual? Es más, ¿cuándo podemos descartar una disfunción relevante?<br /><br />La postura no lo es todo, la biomecánica no lo es todo, la anatomía no lo es todo, pero son relevantes. No creo en el psicoanálisis lesional. No creo que vaya a dar con el por qué ha aparecido “X” ni a que viene realmente asociado. Dejo un enlace de un comentario que leí en 2006 del genial oceanomar (http://www.fisionet.net/web/foros.php?ipfpr_idforo=16&ipfpr_msgid=6737) donde habla de la barrera de función límite. Sea por lo que fuere nuestro paciente presenta dolor. ¿Es nuestra principal función eliminar dicho dolor? ¿Somos o debemos ser los especialistas del dolor? Ya he dicho en muchas ocasiones cual es posición al respecto. Mi paradigma es el movimiento (soy extremadamente mecanicista) y por tanto dolor las “kinesioalgias” (¿existe esa palabra?) son parte de mi trabajo. Dentro de mi sesión de tratamiento incluyo una parte de “educación en salud” donde trato de atenuar miedos del paciente dotándole de una verdad operativa más práctica. El concepto de “pedagogía del dolor” se me hace raro porque entiendo que un hombre de la talla de Arturo puede aplicarla a la perfección (yo me embobo cuando le escucho hablar) pero considero que hay que tener muy claras las ideas para poder hablar de pedagogía. <br /><br />He escuchado críticas a modelos teóricos como el que presenta por ejemplo la gente de McKenzie porque consideran que es irreal o que refuerza conductas alarmistas del paciente. Yo creo que lo que hacemos con nuestra explicación, como digo, es intentar modificar conductas y comportamiento en pro de la evolución (dentro de nuestras posibilidades). Me gustó el concepto de “cuento” del que se habló en el congreso de Alcalá de la SEFID. Creo que el hablar de “disco” o de “cerebro” no es más que intentar dotar de un sustrato teórico nuestra actuación y el por qué de la misma. He presenciado, como parte de un estudio, la explicación que realizan distintos compañeros y en sucesivas sesiones hemos entregado unos cuestionarios para evaluar la comprensión que el paciente ha llevado a cabo y los resultados son curiosos. Parece ser que la gente no entiende en qué difiere YO y CEREBRO. Creo que es un tema complicado de explicar y más complicado de entender. Me encanta “Explain Pain” pero entiendo que no todo el mundo va a integrar dicha información. Por tanto ¿qué es mejor? <br /><br />P.D- en McKenzie se dice desde el principio que es un modelo teórico que no tiene que ver con lo que sucede en realidad y que simplemente se trata de que el paciente entienda por qué tiene que hacer lo que tiene que hacer para reforzar dicho ejercicio.<br /><br />Dejo muchas preguntas abiertas. Llevo tiempo sin escribir y es que tengo más dudas que respuestas. Como siempre, será un placer aprender de vostros.<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-35013885623193902162012-03-07T08:00:00.001+01:002012-03-07T08:00:06.977+01:00Fisioterapia Sin Red<br /> <div style="text-align: justify;"> <div style="clear: both; text-align: center;"> <a href="http://www.fisioterapiasinred.com/" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="fisioterapia sin red" border="0" src="http://www.fisioterapiasinred.com/templates/arthemia/images/banners/wide.jpg" /></a></div> <br /> En los últimos años la información publicada en internet sobre temas relacionados con la salud ha crecido y lo sigue haciendo de forma exponencial. La fisioterapia ha pasado a ser uno de los referentes de la salud 2.0 en lugar de contar con una presencia casi testimonial como hasta hace bien poco, con contenido más encaminado a la promoción, venta de materiales y eventos formativos que a la divulgación de información en si misma. </div> <div style="text-align: justify;"> <br /></div> <div style="text-align: justify;"> La presencia creciente de blogs de temática variada en torno a la<b> fisioterapia</b> y el uso de las redes sociales como altavoz en la difusión de la información generada, el uso del lenguaje audiovisual y el acceso a las nuevas tecnologías de las nuevas generaciones de fisioterapeutas sobretodo, ponen de manifiesto el interés en <b>fomentar el conocimiento y aprendizaje informal</b> fuera del terreno académico que tienen los profesionales de la fisioterapia. </div> <div style="text-align: justify;"> <br /></div> <div style="text-align: justify;"> En vista de este fenómeno que denominamos <b><a href="http://www.fisioterapiasinred.com/" target="_blank">Fisioterapia 2.0</a></b> unos cuantos profesionales que vemos como comienza a existir un exceso de información (<i>infoxicación</i>) en los temas relacionados con la fisioterapia en internet, hemos puesto en marcha este proyecto que trata de servir de filtro, almacén y altavoz de los contenidos de más calidad que se generan en la red.<br /> <br /> En lugar de hacer un repositorio de información sesgado mediante una simple lista de enlaces hemos decidido proporcionar una <b>herramienta gratuita</b> de difusión de contenidos que servirá para que todos tengan las mismas oportunidades de ser leidos, independientemente de quien los haya generado o dónde hayan sido publicados, siendo la calidad del material la que determine su visibilidad, y que se gestione mediante la opinión y votos de todos los usuarios, que sea la propia comunidad la que decida que contenidos son los que más útiles le resultan, o cuales son de más calidad.<br /> <div style="clear: both; text-align: center;"> <br /></div> <br /> <div style="text-align: center;"> <b><span style="color: red; font-size: large;"><a href="http://www.fisioterapiasinred.com/page.php?page=sobrefsr" target="_blank">Más Sobre #FSR</a> | <a href="http://www.fisioterapiasinred.com/page.php?page=who" target="_blank">¿Quienes Somos?</a> | </span></b><b><span style="color: red; font-size: large;"><a href="http://www.fisioterapiasinred.com/page.php?page=normas" target="_blank">Normas de Publicación</a></span></b></div> <div style="text-align: center;"> <b><br /></b><br /> <div style="clear: both; text-align: center;"> <a href="http://www.fisioterapiasinred.com/" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="fisioterapia sin red" border="0" src="http://4.bp.blogspot.com/-Ji6Ik6rZcCw/T1XJzImcbFI/AAAAAAAAAtw/jRw-N3L6LDo/s1600/logo200x200.png" /></a></div> <b><br /></b></div> </div><div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-80930309046717482312012-02-27T10:01:00.002+01:002012-02-27T10:08:53.846+01:00Neurociencia y movimiento<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEibPHGIPwtRQtGfJ-gqBikAdl6aR3rNIXO8sM9O3p3ZQ2j2aQX8j-oR76AoxSRZIxK9ncnXQk5Jtmme8SO8HpwbDa9zQQjoc6UvAehNr6SBK6BsVLHo_0GFsZ7nQOaqSzTV1BjP/s1600/cerebro.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 256px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEibPHGIPwtRQtGfJ-gqBikAdl6aR3rNIXO8sM9O3p3ZQ2j2aQX8j-oR76AoxSRZIxK9ncnXQk5Jtmme8SO8HpwbDa9zQQjoc6UvAehNr6SBK6BsVLHo_0GFsZ7nQOaqSzTV1BjP/s320/cerebro.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5713739789555986738" /></a><br />Estamos de cambio. Las ciencias de la salud se actualizan con los avances en el estudio y comprensión de la red neuronal. Cambian los paradigmas, caen los dogmas y con ellos las falsas creencias. Damos un paso más hacia la hipótesis irrefutable, una verdad operativa más y mejor fundamentada que da explicación coherente a aspectos que hasta ahora quedaban descubiertos.<br /><br />La fisioterapia no es excepción. Debemos revisar preceptos, asumir errores y tratar de corregirlos. Mi profesión, y en concreto la rama a la que pertenezco, es especialmente mecanicista. El individuo es parcelado en subdivisiones anatómicas y funcionales. Atendemos alteraciones específicas en relación a su mecánica.<br /><br />Esto es así para facilitar el aprendizaje y comprensión del “andamiaje”, la anatomía y su fisiología. Y es cierto que pese a que a posteriori tratamos de integrar los diferentes componentes que forman al sujeto, parece que lo hacemos de una manera descerebrada.<br /><br />Ahora conocemos mejor los procesos implicados en la génesis del dolor. Entendemos qué papel juegan aspectos tales como la cultura, las creencias, las actitudes... y somos conscientes de la importancia que tiene la educación y nuestra comunicación con el paciente.<br /><br />El estudio de patologías concretas tales como el miembro fantasma nos han ayudado a comprender los procesos neurofisiológicos subyacentes en el dolor en ausencia de daño tisular y nos acercan al manejo de pacientes con problemas específicos como el dolor de larga evolución, pacientes con procesos de sensibilización central...<br /><br />Y todo esto es fascinante y nos abre un mundo de posibilidades en el tratamiento del paciente. Los profesionales sanitarios no podemos mantenernos al margen de estos avances y es fundamental reconsiderar viejas teorías exclusivamente periferalistas. Hay que integrar los avances en neurociencias puesto que todo proceso corporal es un proceso cerebral.<br /><br />¿Avanzamos en la dirección correcta? Ahí surge mi gran duda. Estoy haciendo mis pinitos en el estudio de los procesos relacionados con el movimiento y la acción. Siempre he considerado que ese es mi ámbito de trabajo, mi campo de actuación. El profesional del movimiento y su relación con la función. Creo que es imprescindible la demarcación profesional porque en mi campo existen numerosos compañeros que centran sus abordajes clínicos en dietas, abordajes somatoemocionales...<br /><br />Entiendo la limitación de la terapia manual en según qué tipo de pacientes. Debemos ahondar en la investigación de dichos actos terapéuticos en base a un cambio o mejora de la subclasificación de los grupos de pacientes sobre lo que se pretende probar el efecto de un tratamiento “X”. La etiqueta “dolor lumbar” es sumamente abierta y sería un avance realizar investigación de calidad.<br /><br />Creo que el fisioterapeuta tiene un papel muy importante en el tratamiento de pacientes con dolor de larga evolución, no porque seamos los terapeutas del dolor, en absoluto debe ser el centro de nuestro campo de actuación, si no porque nuestro arsenal terapéutico resulta ideal para provocar la desensibilización del paciente. La estimulación, distracción, habituación y extinción de la memoria del dolor forman parte de nuestras actuaciones en el día a día (no solo de ahora, pero actualmente contamos con un sustrato teórico que lo fundamenta).<br /><br />No creo por tanto que nuestra principal herramienta de trabajo desde este prisma deba centrarse en la pedagogía del dolor porque no creo que sea algo que atañe específicamente a la figura del fisioterapeuta. Siempre hemos tratado de educar en salud en base a nuestra verdad operativa y ahora además somos conocedores de los beneficios que ello implica. No vamos a dejar de hacerlo, pero la fisioterapia puede aportar mucho más.<br /><br />Un leve vistazo a la función de las neuronas espejo y la revolución que supuso en el campo de las neurociencias y podemos intuir el papel de la acción en su relación con el movimiento. A nivel cortical el sistema motor no tiene nada que ver con los movimientos, si no con las acciones. No nos limitamos a mover brazos, alcanzamos. El modelo igualmente parcelado de percepción, cognición y acto motor se ajusta poco a la realidad. “El cerebro que actúa es un cerebro que comprende” (Rizzolatti). Percepción y acción forman parte de un mismo proceso (integrado)por lo que reducir el sistema motor a un papel de ejecutor pasivo de órdenes originadas en otro sistema, es erróneo.<br /><br />Obviamos el papel de la “intención” en los acontecimientos motores y damos por hecho que el sistema motor es un sistema periférico, sin pararnos a pensar en la “participación” de procesos de orden superior atribuidos a sistemas cognitivos como la percepción o comunicación. Y donde digo participación quiero decir que no solo remiten al sistema motor si no que encuentran en él su propio sustrato neural primario (circuitos parietofrontales).<br /><br />El acto de “asir” participa de la hipótesis de acción donde la congruencia entre selectividades visuales y motoras muestra que los actos potenciales evocados predelinean (más allá de regular la ejecución efectiva) un sentido del objeto visto al que se atribuye una “valencia significativa”, como si se reaccionara no al estímulo como tal (forma o aspecto sensorial) sino también al significado que encierra para el sujeto en acción y “reaccionar a un significado equivale a comprender” (Petit).<br /><br />¿Y en qué se traduce esto? En que el hecho de trabajar reintegración de patrones motores en pacientes con kinesiofobia puede teóricamente ser más interesante trabajarlos con intencionalidad de acción, ejecutar programas orientados a la acción con propósito más que al movimiento. Eso, por ejemplo, puede ser una fuente interesante de investigación. Y obviamente en la intencionalidad entran en juego todos los aspectos relacionados con la actitud y lo citado anteriormente.<br /><br />Entiendo que tenemos por delante algo que puede darnos respuestas y guías clínicas en el manejo del paciente y por tanto es un camino a seguir. Sigo pensando que la figura del fisioterapeuta necesita una demarcación y una delimitación. Conozco a muchos compañeros “jugando” a los médicos, a los nutricionistas, a los psicólogos (cada vez conozco más de éstos con lo de la mala comprensión por parte de muchos de la “pedagogía” del dolor). Es importante no perder el camino para poder tratar de llegar a buen puerto.<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-76516202260633922612012-02-01T11:38:00.000+01:002012-02-01T11:39:09.238+01:00Reflexión introspectiva imaginativa<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg1JAXMRcYEoF9q7PeP37itV8DFjHtVXm9uk5rEP37r1NDkSgcCD1VQGbwmGcWReq_Wygfs3-GEoRn8O-tCTIqT8UCrufTOV6gDQkjSB1snzAD3cOEax1lMqxucVsWmRUd5Buku/s1600/man-with-blue-question-mark.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 300px; height: 300px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg1JAXMRcYEoF9q7PeP37itV8DFjHtVXm9uk5rEP37r1NDkSgcCD1VQGbwmGcWReq_Wygfs3-GEoRn8O-tCTIqT8UCrufTOV6gDQkjSB1snzAD3cOEax1lMqxucVsWmRUd5Buku/s320/man-with-blue-question-mark.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5704114808717205362" /></a><br />Tenemos una costumbre muy española que consiste en opinar de absolutamente todo como si fueramos entendidos en la materia. Todo el mundo sabe dirigir un equipo de fútbol. Cualquiera podría ser el entrenador del Madrid, el Barcelona o la selección española. Todo el mundo sabe cómo solucionar esto de la crisis porque todos tenemos conocimientos avanzados en economía y en política. Qué fácil el liderar un país...<br /><br />Y resulta que cuando saltas al ruedo y te plantas frente al toro, lo de torear “acongoja” al más pintado. El proceso de aprendizaje conlleva una interiorización de la información recibida hasta hacerla propia. Es una transición compleja porque requiere “traicionar” a la objetividad durante un periodo de tiempo. Una vez hemos experimentado lo suficiente como para asumirlo, entonces podemos volvernos menos “dogmáticos” y más objetivos y flexibles a la hora de proceder.<br /><br />Es frecuente que tras realizar una formación X “coincida” que vemos muchos más pacientes con esa presentación clínica. De hecho incluso más de los que realmente se nos presentan. Por una parte porque somos capaces de identificar algo que antes posiblemente ni siquiera supiéramos que existía. Por otra porque necesitamos poner a prueba nuestros nuevos conocimientos y tenemos la necesidad de encontrar lo que buscamos. Shaclock avisa sobre este fenómeno relacionado con la neurodinñámica. Después de realizar su curso los alumnos tienden a diagnosticar mucha más patología neural de la que realmente encuentran.<br /><br />Ya he comentado en alguna entrada que porto la etiqueta de “enfermo de Chron”. Hace mucho tiempo leí a Arturo citar la colitis ulcerosa como un posible error evaluativo. Y hace ya tiempo que le doy “vueltas” al asunto. “El daño tisular” consiste en un proceso imaginativo que nosotros como pacientes construimos en base a nuestros conocimientos, sean más o menos exactos. La opinión de los “expertos” modelan y condicionan nuestra visión y nos conducen a la hora de hipotetizar por qué experimentamos dolor. Los que trabajamos en el ámbito sanitario estamos muy acostumbrados a escuchar a los pacientes hablar de “nudos”, “tendones montados” y “pinzamientos”, verdades operativas todas ellas completamente válidas para un desconocedor de la materia como puede serlo cualquier paciente. Si usted es un paciente que frecuenta la consulta de un quiropráctico asociará cualquier dolor a una subluxación vertebral que oprime el riego nervioso de la médula espinal al área que duele.<br /><br />Por tanto, nosotros nos montamos nuestra película en base a la información que percibimos. “Si me duele X debe ser porque algo en X no funciona correctamente”. La pruebas complementarias tratan de confirmar dicho planteamiento. Realizamos radiografías, resonancias, ecografías, electromiografías...<br /><br />- “La resonancia muestra una clara protusión discal L4-L5 compatible con su dolor actual”<br />“Es que la resonancia que esta mirando es de 2007. Entonces no tenía dolor”<br />“...”<br /><br />Pues bien, a la hora de “racionalizar” y dar explicación a la experiencia dolorosa, nos surtimos de hipótesis plausibles para nosotros. Cuando he tenido un episodio de “dolor abdominal” agudo, un “brote”, han intentado asociarlo a cosas como el estrés, la mala alimentación... condiciones que sí, pueden ser un factor contribuyente, inclusive un factor desencadenante en algún momento puntual que soy capaz de recordar, pero no siempre hay una asociación directa. Puedo desmontarme a mi mismo muchas de esas hipótesis que me plantearon en su momento, porque he tenido situaciones de mucho estrés y mucha ansiedad en lo que he estado perfectamente y otros en lo que no ha habido ninguna circunstancia que altere mi estado de “armonía mental” en los que el dolor ha sido insufrible.<br /><br />Y he observado un patrón que se repite en más de una ocasión. Discutir. Es “mi viento sur”. Algo que suele producirme fuertes dolores abdominales. Indistintamente de si es una gran o pequeña discusión. El resultado es siempre similar: “mi estomago se queja”. Hipótesis personal: error evaluativo. Es posible que el estado de mis tripas actualmente no difiera en exceso del que se vio hace ahora tres años, fecha en la cual me realizaron el último estudio de las mismas. En menos de un mes repetirán las pruebas y podremos valorar el tejido en busca de alteraciones morfológicas compatibles con los síntomas actuales.<br /><br />Aun así, como padeciente, cada vez observo más claramente patrones relacionados con la hipótesis del error evaluativo como desencadenante del programa dolor, agravado después por mi propio componente cultural basado en mi experiencia. Y es cuando el dolor aprieta cuando intentas acceder a ese área de conocimiento que tú explicas diariamente a los pacientes en consulta. Y es entonces cuando entiendes lo difícil que es la dicotomía cerebro-yo, porque no acabas de entender bien por qué pese a que entiendes la hipótesis, a que crees en el planteamiento de un cerebro temeroso que activa el programa dolor de manera “incorrecta”, no eres capaz de obtener una modulación de la respuesta dolorosa. Porque esperas poder dominar esa parte no consciente del cerebro argumentando sesudamente y en el acto. Y te obcecas.<br /><br />En el inicio de lo que podríamos considerar un nuevo “brote”, que suele transcurrir a lo largo de una semana más menos de evolución, el primer día que intenté abordarme a mi mismo con este enfoque, no conseguí apenas respuesta, pero el segundo día mi actividad fue practicamente la de cualquier día normal y el tercero fue como cualquier otro, sin cambios en mi dieta, sin cuidados especiales. ¿Por qué debería hacerlos?<br /><br />Seguiremos investigando y actualizaré mi planteamiento cuando tenga resultados.<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-23531038506322298732012-01-26T09:23:00.004+01:002012-01-26T09:33:16.473+01:00Expectativas, condicionantes y errores probabilísticos<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgW-Y_dVbnCYkz0Mx01RoGpqB_21qZdgpTAjJPrveVOAJwvyA7LrzKe7BUjzjCtV_tUu4en8Y-NtpNDogHXBPa9FMNXKdQ0oP2rZH5vrMvn2zojPjZlx2cj8M9UQVninY0WiHq7/s1600/expectativas.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 268px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgW-Y_dVbnCYkz0Mx01RoGpqB_21qZdgpTAjJPrveVOAJwvyA7LrzKe7BUjzjCtV_tUu4en8Y-NtpNDogHXBPa9FMNXKdQ0oP2rZH5vrMvn2zojPjZlx2cj8M9UQVninY0WiHq7/s320/expectativas.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5701855663673827234" /></a><br />Hemos avanzado mucho en la comprensión del dolor. Ahora sabemos que no duelen los tejidos y que es el cerebro el que activa el programa dolor en presencia de una amenaza potencial de daño tisular (necrosis inminente). El “programa dolor” tiene como finalidad protegernos de aquello que el cerebro considera potencialmente peligroso y para que el sistema funcione correctamente debe ser un programa que se active antes de que sea tarde, en este caso, antes de que se produzca el daño. Es una especie de “correctivo”. Sapolsky en su libro hace referencia a una luz roja en la punta de la nariz como sustituto al dolor por lo desagradable de la experiencia, pero es ahí donde reside su esencia, es difícil eludirlo. Una luz roja puede omitirse. Uno puede decidir seguir apoyando su maltrecho pie en el suelo y prescindir del aviso luminoso, pero es incapaz de apoyar el pie si eso implica un dolor insufrible, acompañado además de una alteración motora como lo es la inhibición de musculatura, merma propioceptiva... y como decía, debe activarse lo antes posible para minimizar el posible impacto asociado. De nada sirve que discrimine la diferencia entre una serpiente y una rama una vez he evidenciado el mordisco de la primera. El sistema de vigilancia nos obliga a dar un salto hacia atrás y desde ahí podemos diferenciar con seguridad si debemos o no avanzar en esa dirección.<br /><br />¿Cómo sabe el cerebro qué es y no potencialmente dañino? Una cuestión de ensayo error en primer lugar (yo de pequeño intenté poner la mano en la estufa, los dedos en el enchufe, en el ventilador...), lo que podríamos llamar aprendizaje directo (experiencia), y por otra parte por lo que nos enseñan los demás por sus propias experiencias o conocimientos aprendidos previamente (cultura). A mi por ejemplo me pasa que cuando quito la sabanilla desechable de la camilla, oigo chispazos de la electricidad estática que tienen. Pues bien, cuando abro la puerta de mi consulta, con agarradera de metal, me da un calambrazo de miedo. ¿Qué sucede? Que cada vez que retiro las sabanillas abro con miedo. Miedo de verdad porque es muy desagradable la sensación. En ocasiones titubeo un poco antes de estirar el brazo para abrir, y lo hago muy lentamente y apretando los dientes. He aprendido por exposición. Y nunca he dado a luz, pero soy consciente de lo sumamente doloroso que es para la mayoría de mujeres. Mi entorno me ha enseñado a huir de los partos (y de los hombres que regalan caramelos en las puertas de los colegios).<br /><br />Así que la tarea del cerebro consiste en prevenirnos de aquello que puede atentar contra nuestra integridad. Para eso se sirve de un sistema probabilístico donde analiza en base a muchas variables la necesidad o no de activar la alerta nociceptiva. Algunas de esas variables, como ya he expuesto, son el aprendizaje, el entorno... la cultura. Y en muchas ocasiones esto puede condicionarnos más de lo que podría parecer a priori.<br /><br />Una noche viendo un documental sobre marketing en la televisión hablaban de cómo la música conduce una escena en una película en una dirección u otra. Ponían un vídeo en el que se veía a una jóven que corría en una dirección, como agobiada y a un jóven que iba tras su pista, veloz. La escena estaba rodada en blanco y negro y se iban alternando imágenes de uno y otro. Se presentaba la escena a un grupo de personas mientras de fondo sonaba una balada romántica interpretada por un piano. Estas personas cuando describían la escena coincidían en hablar de una pareja de enamoradas que intentaban encontrarse con ímpetu y anhelo. En cambio a un segundo grupo de espectadores se le presentaba la misma escena acompañada esta vez de sonidos fríos y estridentes, como la melodía de una película de suspense/miedo. Todos coincidían en describir la escena como la antesala de una violación o un secuestro.<br /><br />Es curioso como nuestras expectativas nos condicionan. La RAE define expectativa como “la posibilidad razonable de que algo suceda”. Ayer cuando mi compañero Ismael trataba de explicarle a una paciente algo le puso el siguiente ejemplo: “imagínate que paseas tranquilamente por el cauce del Turia (un parque que se hizo en Valencia en el antiguo cauce del Turia que es digno de disfrutar). Hace sol, los pájaros cantan y esta lleno de gente practicando deporte a tu alrededor. Ahora imagina que tienes que bajar a las doce de la noche (esta muy poco iluminado y no hay circulación de vehículos por lo que da bastante mal rollo). Tus sensaciones seguro que son diferentes. Estás mucho más alerta, vigilante... pues eso es lo que pasa en el cerebro cuando bla, bla...”<br /><br />Y tiene razón. Nuestro cuerpo esta predispuesto a que algo puede suceder. Es como cuando tienes una reunión en la que sabes que va a haber bronca, ya vas con mal cuerpo de casa. Yo recuerdo cuando practicaba full-contact y durante una época nuestro “sensei” introdujo en la clase mucha más parte de combate. Cuando salía de mi casa con la mochila y doblaba la esquina de la calle donde se encontraba el gimnasio, mi corazón se aceleraba. Mis glándulas suprarrenales liberaban adrenalina para prepararme para lo que me esperaba. Mi cuerpo se ponía alerta ante la amenaza inminente al que lo sometía.<br /><br />Hay un ejemplo gráfico en el libro “Explicando el dolor” (de lectura imprescindible) al respecto. Un montañero que decide ascender a la cima de un pico pero al llegar al desnivel “X” se siente morir por lo que abandona por imposibilidad para continuar. Cuando tiempo después vuelve a intentarlo, al llegar al desnivel “X” le entran todos lo males y decide dar media vuelta antes de que sea tarde. Su límite está en “X” porque tras la experiencia negativa de la primera vez considera que seguir más allá es peligroso. Ha generado una expectativa de muerte inminente. Y lo mismo nos sucede a nosotros con la muerte celular inminente. Os adjunto una imagen que puede aclararlo:<br /><br /><a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiSUGj9fA19sd1qjsKpi2wqITo5FlhpQwLX7lxQX8qfSavMM8WaalI5aXpTnwAsjEtJ-icIAFkhh8Thet9BZECC_IxLiflzqEW6py9curSoCDHaWgDvFnI7Y2AxG0_CARW5rk3V/s1600/twin+peaks.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 100px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiSUGj9fA19sd1qjsKpi2wqITo5FlhpQwLX7lxQX8qfSavMM8WaalI5aXpTnwAsjEtJ-icIAFkhh8Thet9BZECC_IxLiflzqEW6py9curSoCDHaWgDvFnI7Y2AxG0_CARW5rk3V/s320/twin+peaks.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5701855130042592002" /></a><br />Del mismo modo que la estimulación de los nociceptores en los tejidos puede desencadenar una activación del programa dolor (como puede no hacerlo, hay más variables en el juego como son: el ambiente, la situación, las creencias y actitudes del sujeto, memoria...), una activación del programa dolor puede provocar una respuesta en los tejidos que se puede traducir en una respuesta inflamatoria y todo lo que va asociado al programa dolor en presencia de daño pero en ausencia del mismo.<br /><br />Si cada vez que corro 17 minutos noto dolor en mi rodilla pero puedo realizar otras actividades como jugar a fútbol con mucha intensidad, hacer sentadillas con mucho peso, practicar esquí, etc... es posible que mi problema principal no vaya asociado a una alteración de los tejidos de mi rodilla si no a un error probabilístico en la decisión de la activación del programa dolor por parte del cerebro, que ha generado la correlación entre trote más allá de 15 minutos amenaza potencial de daño tisular. Y del mismo modo que la banda sonora de la escena que comentaba antes puede hacernos llegar a una conclusión equivocada, una interpretación incorrecta de la situación puede complicarnos mucho la existencia.<br /><br />Sabemos que además del proceso inflamatorio al que pueden verse sometidos los tejidos en la respuesta del programa dolor, suele haber una sensibilización del sistema nervioso. Actitudes, creencias, comportamientos, el entorno, todo participa en el proceso de filtrado por el que cualquier estímulo pasa antes de llegar a la consciencia. Si nuestra rodilla nos impide disfrutar del viaje que teníamos programado, nos incapacita para realizar las actividades físicas que nos mantienen serenos y calmados tras nuestra ardua jornada laboral, si además puede suponer una complicación de cara a realizar nuestras tareas, si a nuestro padre eso mismo lo acabó llevando a quirófano y no tuvo más que complicaciones desde entonces... la respuesta estará condicionada negativamente seguro. Tenemos una mayor predisposición a incrementar la sensibilización del sistema nervioso y por tanto facilitar la respuesta del programa dolor.<br /><br />Por tanto, debemos ser conscientes que el proceso de aprendizaje y la cultura son fundamentales para desenvolvernos correctamente y evitan nuestra exposición a agentes potencialmente peligrosos, pero pueden condicionar respuestas exageradas o erróneas debido a una probabilidad que puede resultar o no en acierto. Siendo conscientes de esto, seguramente nos ahorraremos mucho sufrimiento.<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-59074308602064976392012-01-23T00:49:00.003+01:002012-01-23T00:58:22.438+01:00Guía práctica del perfecto incompente/creador de complicaciones<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjbsArjL6R35B7wPpjnLyU-n2WJyQI2GzZ-SwaIyNU4PZMD3YIN7LDh3U4ApkobrSxn8CTkcgz40iAB7g04qr_SEVW6BQmXKtXvZ4pTOS2S_AFK1N4jc27qxruI9H1gdf9DS-n2/s1600/incompetente.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 270px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjbsArjL6R35B7wPpjnLyU-n2WJyQI2GzZ-SwaIyNU4PZMD3YIN7LDh3U4ApkobrSxn8CTkcgz40iAB7g04qr_SEVW6BQmXKtXvZ4pTOS2S_AFK1N4jc27qxruI9H1gdf9DS-n2/s320/incompetente.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5700609688464374066" /></a><br />Se tiene a protocolizar y es importante que exista un "modus operandi" estándar sobre el cual pueda regirse la praxis del profesional sanitario. Del mismo modo que hay un código deontológico propongo crear esta entrada a modo de guía o consejos varios para que el profesional sanitario se convierta en un verdadero incompetente. Estos son los pasos a seguir. Entienda el lector que esto tan solo es un boceto y todavía debe mejorarse y completarse por lo que desde aquí invito al lector a que en la sección "comentarios" aporte lo que considera que falta o hay que mejorar. Sin más dilación les dejo con mi propuesta:<br /><br />Siéntese tras una oronda mesa, a poder ser en una silla a una altura considerablemente superior a la del paciente. Intente no apartar la mirada de la pantalla del ordenador durante el proceso de la entrevista. Transmita durante todo el tiempo que pasa con el paciente nº X (su nombre es irrelevante) la sensación de que le importa muy poco lo que le cuenta, que le parece un/a loco/a histérico/a y exhagerado/a. Muestre su lado más inhumano. La empatía es una muestra de debilidad. Ocúltela bajo una tez inmutable. En la medida de lo posible evite el contacto con el paciente. Interrúmpale constantemente para poner en su boca lo que usted quiere que le diga. Mueva su cabeza de un lado a otro y ponga cara de preocupación cuando le enseñe el informe de la resonancia magnética. Puede incluso golpearse con la palma de la mano en la frente mientras sostiene al trasluz la imagen. Acuérdese de espetar frases lapidarias del tipo “va usted a quedarse en silla de ruedas por culpa de las hernias” o “usted debe abandonar todo tipo de actividad física y ponerse hielo después de trabajar mientras mantiene las piernas en alto”.<br /><br />Una vez finalizada la entrevista decida el tratamiento si contar con el paciente. De hecho intente explicarle lo menos posible. Cuanto menos sepa acerca de qué le acontece y qué puede él hacer para mejorar su condición, mejor. Es importante que quede constancia de lo poco relevante que es su papel en el tratamiento. Debe sentirse un mero espectador que nada puede hacer más que contar con su experta ayuda. No necesita saber de anatomía, fisiología o patología. El paciente no es un estudiante. No pierda tiempo en detallar cosas que por supuesto no va a entender el paciente. Sí es importante que conozca su etiqueta diagnóstica. Cuanto más rebuscada y peor suene, mejor que mejor. No importa que los síntomas y la resonancia magnética no tenga una correlación clínica. Puede usted hipotetizar como el Dr. House frente a su pizarra de cristal.<br /><br />No olvide hacer hincapié en la cronicidad del proceso. Cualquier patología por nimia que pueda parecer puede complicarse y cronificarse obligando al paciente a tener que vivir subyugado al dolor. ¡Casi lo olvido! Es de importancia capital que quede completamente claro que dolor significa que los tejidos están dañados. Existe lesión tisular, inflamación y necrosis y eso se traduce en dolor. El único dolor que no tiene una relación directa con los tejidos es el psicológico. Debe usted repetir muchas veces la palabra psicológico intentando sostener un tono despectivo cada vez que la pronuncie. Sus esfuerzos deben centrarse por tanto en el tratamiento del daño presente (que suele observarse en las radiografías, RMN y en la imaginación del especialista).<br /><br />Vuelva a citar al paciente de manera periódica puesto que él depende enteramente de usted. Acuérdese de reñirle y echarle en cara cosas la próxima vez que acuda a consulta. Si no mejora siempre es culpa del paciente que no quiere mejorar. Recuérdele lo letal de su proceso. Nunca más va a ser quien era. No va a poder seguir practicando deporte, solo aquagym, pilates o natación (da lo mismo en qué consistan esas tres actividades... recoméndelas siempre). El deporte es malo. La actividad física es mala y el trabajo es malo. Si el paciente esta dolorido, debe hacer reposo. Da lo mismo que el sustento de su familia dependa de su trabajo. Si usted considera que debe reposar, debe reposar (que para eso usted es el experto). <br /><br />Insisto una vez más en lo de daño y dolor. Es un concepto que tiene que quedarle claro a su paciente, especialmente en pacientes que presenten historias con dolor de larga evolución, Éste se debe a alguna alteración estructural que no han sabido diagnosticarle antes y solo usted es capaz de relacionar. Para su tratamiento apóyese en terapias alternativas que presenten una evidencia muy pobre. La homeopatía es ideal porque pese a que su principio teórico es insostenible, mola mogollón. Y si usted como especialista utiliza la homeopatía, le convierte en un especialista guay.<br /><br />Como posibilidad, puede recomendar al paciente que ingrese en una asociación de afectados y afligidos por un mal como el que presenta el paciente. Busque un grupo de terapia donde, a poder ser, los enfermos cuenten sus limitaciones en voz alta para que todos sean consciente de cómo van a acabar y les manden panfletos informativos sobre las últimas investigaciones del laboratorio del Dr. Bacterio para el tratamiento de su incurable enfermedad. Aconséjele también que compre chismes inútiles como una manta para aplicarse magnetoterapia en casa, una pulsera que le mantenga conectado al pulso del núcleo de la Tierra (patente pendiente, no os paséis de listos) o cualquier absurdez que parezca un timo y además resulte serlo.<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com9tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-81846382150029744432012-01-16T20:18:00.003+01:002012-01-16T20:21:40.994+01:00Abuso, sobreuso, cantidad de carga y paseo por la montaña (GR10Xtrem)Este sábado tuve una “aventura” (o locura, depende del lector) consistente en un ultratrail de montaña. La prueba en cuestión era una carrera de 93 kms. de montaña con un desnivel acumularo de 6.800 m. y un perfil como el que sigue:<br /><br /><a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhcxmnJsFnzJwAcei01PpJkGCQrxEb3psHNgm3To-Tw2VZH_Md6dYsK-ti3Ys5pVGJyb0TP0jIgPTaLQtk52I46vJPMM0vHk4BqYHs4M9vxo762X4C2pCLpgw_mE4_0JzIfWr6g/s1600/perfil.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 84px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhcxmnJsFnzJwAcei01PpJkGCQrxEb3psHNgm3To-Tw2VZH_Md6dYsK-ti3Ys5pVGJyb0TP0jIgPTaLQtk52I46vJPMM0vHk4BqYHs4M9vxo762X4C2pCLpgw_mE4_0JzIfWr6g/s320/perfil.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5698311495113563426" /></a><br />Mi intención en esta entrada no es hacer una crónica de la carrera propiamente dicha, si no profundizar en aspectos relevantes desde un punto de vista “científico-sanitario”. El motivo que me condujo a iniciar esta andadura lo narré en <a href="http://aprendiendofisioterapia.blogspot.com/2011/03/el-reto-de-cero-cien.html">el reto de cero a cien</a>, pero simplemente por refrescar, lo que buscaba era ponerme en la piel de alguien a quien le supera la aventura antes de planteársela siquiera.<br /><br />Es óbice comenzar diciendo que mi entrenador (y preparador físico) hizo una muy buena planificación durante 10 meses para llegar preparado a esta carrera pero mi mala gestión de mi tiempo hizo que no la cumpliera como hubiera debido en los plazos acordados. Esto significa que la fase específica de entrenamiento de montaña fue insuficiente y no cumplí con los objetivos marcados y aquí entramos en uno de los primeros puntos a tener en cuenta.<br /><br />Hay dos variables muy interesantes desde el punto de vista de la biomecánica que son la cantidad de carga y la capacidad de carga. Un tejido X puede soportar una cantidad de carga Y antes de sufrir un daño. Es un modelo que siempre nos han enseñado con una goma. Tiene una capacidad de carga que el permite adaptarse a un estiramiento Y. Una vez superada la capacidad de carga, existe un daño irreparable que impide que recupere su forma original (no estoy hablando de dolor. Es un modelo físico teórico).<br /><br />La fase de readaptación funcional implica, entre otras, una adaptación progresiva a la carga. Y esto supone una adaptación de los tejidos desde un punto de vista “periferalista” pero también una adaptación del sistema nervioso y por ende del cerebro. Sería algo así como crear un estímulo de baja amplitud que no genere una respuesta defensiva: “parece que no es para tanto” e ir incrementado poco a poco la cantidad de carga hasta “normalizarla”.<br /><br />Pues bien, pese a que mi estado de forma es bastante aceptable hoy por hoy, la ausencia de fase de transición a carrera de montaña supuso un grave inconveniente. Hacía un par de semanas que notaba puntualmente una molestia en la cara anterior de mi rodilla izquierda. No me molestaba al correr, no me molestaba en las actividades de la vida diaria, simplemente algunos días amanecía con ella y ese día hacer una flexión completa (cuclillas) me resultaba incómodo. Hasta ese punto: “en casa de herrero cuchillo de palo”. Nada de nada. No suponía una amenaza para mis entrenamientos.<br /><br />El sábado, tras 30 kilómetros la rodilla comenzó a manifestarse en forma de un dolor soportable en la cara anterior cuando descendía al trote. No molestaba nada en ascensos o llanos. Si la bajada era moderada tampoco. Cuando la inclinación era mayor el dolor se intensificaba. Tanto que pasado el kilómetro 35 comencé a plantearme que no iba a poder terminar.<br /><br />Parada en el punto de avituallamiento para comer. Tras quince minutos continuamos la aventura. Seguimos rodando por una zona de llano bastante larga por lo que vuelvo a disfrutar de la carrera. Llegados al kilómetro 52 una nueva bajada hace que la intensidad del dolor sea de un 8/10. Maldigo cada metro en descenso. Me planteo tirarme al suelo y rodar cual croqueta para evitar seguir cargando en mi cada vez más maltrecha rodilla. El kilómetro 59 se convierte en una verdadera pesadilla. Me agarro a lo que puedo para intentar no apoyar el pie en el suelo. La mecánica de mi marcha se ha vuelto tan sumamente aberrante que estoy convencido de que en los talones me he hecho dos ampollas del tamaño del pulgar (hecho confirmado una vez me quité las zapatillas). Tardamos prácticamente una hora en hacer ese tramo. A mi se me hizo eterno. Mi cuñado y compañero de aventura no dejaba de repetirme que nos retiráramos en el 60, pero quería seguir. Me hacía muchísima ilusión acabar pese a que no me jugaba nada. Estaba convencido que el problema era un síndrome femoro-patelar y no pensaba que fuera a traer ninguna consecuencia más allá del dolor que estaba sufriendo continuar unos kilómetros más (30 en ese punto).<br /><br />Llegamos al punto de control y nos dicen que vamos fuera de tiempo (nos pasó factura esa bajada inacabable) pero que llevamos buen ritmo. Podemos seguir si queremos. Así lo hacemos, pero tres kilómetros después somos interceptados por “el corredor escoba”. Una suerte de juez que se encarga de hacer que no disfrutes de una travesía por la montaña porque sientes su yugo sobre ti durante todo el trayecto. Siento que él y su compañero están mirando con atención mi acusada cojera. Me preguntan si puedo seguir y digo que por supuesto. Me piden que acelere el ritmo porque vamos muy justos de tiempo para entrar en el siguiente control. Lo intento pero mi cerebro considera que no es una buena elección. Dolor 9/10. Consciente de la situación nos quedan dos opciones: salir de la carrera y seguir a nuestra cuenta y riesgo, lo que implica que tanto si llegamos como si no, no tenemos forma de volver a nuestro punto de partida, o bien abandonar, lo que implica tener que llegar al siguiente punto de control, en este caso en el kilómetro 80, para allí retirarnos y que nos acerquen al punto final donde nos espera el autobús. <br /><br />La amenaza de daño potencial estaba tan justificada para el sistema evaluativo que cada nuevo apoyo del pie en el suelo era un castigo. Llegar hasta el avituallamiento del 80 se convirtió en una lucha interna. Por una parte me planteaba “¿Por qué te has hecho esto? ¿Valía la pena ir contra toda la gente que te insistió en que esto no valía la pena?”. Lo cierto es que no me arrepiento en absoluto de haberme sometido a dicha prueba. No creo que vuelvan a verme por allí, pero me gustó experimentar lo que experimenté durante la misma.<br /><br />Llego como puedo al mi último avituallamiento (como puedo es acompañado de un bastón con una marcha al estilo “Dr. House”. Km. 80 y fin de la aventura. Buenas sensaciones (hasta que paré, momento en el cual un sueño letal se apoderó de mi). Me encontraba mejor de lo que esperaba. De hecho, al día siguiente notaba las piernas cansadas pero ninguna molestia en ninguna parte. Curioso. Hay que hablar entonces de la amenaza de daño y la alerta nociceptiva. Pero en otra entrada. Ahora a disfrutar de un merecido descanso.<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-7617890171371725992012-01-09T17:33:00.001+01:002012-01-09T17:35:37.828+01:00ROL DEL ENFERMO (O PONTE TÚ EN MI LUGAR)<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEitMmgLBuFkGynOTEllzETCncZIwGPrT1H_PEqZqLFvcqidkssseHoMf1ge4hhfCjw0XOHUo3luHrCC0KVgNp1jXUNTZXnXCVNyxjkbJewBlY7I9TMB62hNUVfY22Ngab65vHXY/s1600/enfermo.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 312px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEitMmgLBuFkGynOTEllzETCncZIwGPrT1H_PEqZqLFvcqidkssseHoMf1ge4hhfCjw0XOHUo3luHrCC0KVgNp1jXUNTZXnXCVNyxjkbJewBlY7I9TMB62hNUVfY22Ngab65vHXY/s320/enfermo.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5695671640714036882" /></a><br />Siguiendo la línea de la entrada del otro día, el jueves pasé mi único día de “permiso” (vacaciones) en la sala de espera de urgencias del hospital. Y digo pasé el día porque transcurrieron 7 horas desde que entré hasta que salí de allí. Tuve tiempo para leer y tiempo para meditar. Volví al tema de la indefensión. ¿Por qué uno se siente así cuando enferma? ¿Por qué nos hacemos tan pequeños?<br /><br />Lo cierto es que lo desconocido asusta. Cuando suena la alarma aparece una actitud defensiva. La sangre es muy alarmante. La sangre de uno mismo, mucho más. Al parecer tuve un sangrado intestinal. Todas mis alarmas se encendieron no por lo que estaba sucediendo si no por lo que iba a suceder: “si no se corta tendrán que medicarme. Los corticoides me alteran el sueño, estoy más irascible, se me hincha mucho la cara... además mi ritmo de entrenamientos tendría que cambiar. ¡No puedo ir a la carrera del fin de semana, supuesto objetivo del entrenamiento que comencé en marzo!...” y claro, la cabeza va muy rápida. Ahora a llamar al equipo de digestivo que me lleva y a seguir el procedimiento: “a urgencias”.<br /><br />Primero pasé por una enfermera bastante cansada que me tomó la tensión, temperatura y me sometió a unas preguntas sencillas. A la sala de espera. Primera visita con la doctora. Analítica y placa. A la sala de espera. Me realizan ambas pruebas. A la sala de espera. Segunda visita con la doctora. Más pruebas. A la sala de espera hasta que baje la de digestivo. Entro con ella y me repite alguna de las pruebas que me han realizado ya anteriormente. A la sala de espera a que hable con la primera doctora y hagan la pauta de tratamiento. Sala de espera. No me llaman. Siguen sin llamarme. ¡Ups! Se les ha olvidado que ya han procesado el alta y ya no aparezco en el ordenador. Me dan la hoja y ya puedo irme (hasta que mañana vaya a que me vean en mi servicio).<br /><br />La conclusión, a la espera de que me vea “mi doctora”, es que no se trata de un brote inflamatorio y por tanto no preciso medicación. Respiro con tranquilidad pero con cierta desconfianza puesto que todavía no esta cantada la victoria. Y eso me demuestra que mi cabeza ha ido demasiado deprisa. Y yo soy consciente de lo que me sucede. Tengo nociones de cómo me afecta “mi enfermedad”. No soy muy alarmista porque no me afecta apenas en mi vida. Pero cuando lo hace, cuando tengo un “episodio”, lo cierto es que me limita mucho, especialmente el dolor, que me dificulta levantarme de la cama.<br /><br />El dolor es horrible. Soy consciente de su importancia. Tengo bastante claro su mecanismo de acción, entiendo cómo se modula, pero cuando acucia es exasperante. Como terapeuta intento ponerme en la piel del paciente que acude a mi consulta. Intento entenderle y respeto siempre su historia y la forma en que la vive. Es muy fácil dar consejos desde fuera. Torear desde la barrera esta chupado. El problema viene cuando uno se planta delante del toro.<br /><br />Cada vez más veo gente con patología de larga evolución, muchas asociadas por su facultativo a procesos de sensibilización central y en muchos casos con una grandísima batería de pruebas que descartan la implicación de factores anátomo-patológicos. Es decir, patología aparentemente no asociada a daño tisular (de la que habla Arturo), en la cual sí existen alteraciones del movimiento pero no un “comportamiento mecánico”. Me hablan de sus dificultades para poder afrontar el día a día. De cómo una tarea sencilla se convierte en muy complicada. De las limitaciones que sufren en su calidad de vida a consecuencia del dolor. Y entiendo que es desolador.<br /><br />Conozco a muchos compañeros que critican a ese tipo de pacientes como “simuladores, exageradores o gente que busca llamar la atención”. Es curioso que no opinen del mismo modo de quien tiene una alergia alimentaria. Pero lo cierto es que un paciente, un padeciente, un enfermo, es una persona que sufre. Y la búsqueda de una abolición del dolor, de un diagnóstico, de una posibilidad de tratamiento pasa por un proceso de indefensión mayor o menor en el cual pones tu confianza y tu salud en las manos de otro.<br /><br />Además de nuestra obligación como profesionales respecto al trato con el paciente, hemos de ser consciente la situación por la que pasa aquel que viene a visitarnos. Hoy por hoy no hay demasiada gente con ganas de perder tiempo y dinero en algo imaginario. Quien acude a consulta lo hace porque tiene algo que le empuja a buscar remedio y es importante que sepamos entender su situación a la hora de plantear y dosificar el tratamiento.<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-37770019390986778992012-01-04T12:30:00.003+01:002012-01-04T12:33:03.441+01:00¿Publicidad engañosa?, ¿ignorancia? o ¿tonto es el que dice tonterías?“Un gran poder conlleva una gran responsabilidad”. Un profesional tiene una serie de obligaciones para con su profesión, sus compañeros y sus clientes. En este caso, del mismo modo que el otro día hablábamos del trato con el paciente, de la empatía, hoy quiero hablar de la “competencia” o ese estúpido afán por pisar al que antaño fue “compañero” y ahora es un “rival de la competencia”.<br /><br />Yo he crecido como profesional gracias a muchos compañeros que me han ido orientando, me han ayudado, me han enseñado... gracias a gente que ha compartido conmigo lo mucho o poco que sabía. Creo que es la base y enriquece a cualquier colectivo. Aquí en la clínica hemos tenido mucha gente en prácticas, cosa que muchas veces es un inconveniente (hablaremos sobre ello si queréis), simple y sencillamente porque si podemos aportar algo a nuestra profesión lo haremos. Y si conseguimos que X personas trabajen “mejor”, con más recursos, con más conocimientos, pues nos repercute a todos. Si la gente confunde al fisioterapeuta con el “pelagatos” o “friegaespaldas” porque hay mucha gente que se dedica única y exclusivamente a fregar espaldas sin ningún criterio, es lógico que la confusión exista. Si durante mi existencia me he topado con tres enfermeras y las tres han sido majísimas, puedo caer en la simple confusión de pensar que todas las enfermeras son majas (y creédme, hay muchas majísimas, como mi hermana, pero hay cada cardo por ahí... como en todo).<br /><br />Soy un gran defensor de la inteligencia colectiva y esto del 2.0 me lo refuerza cada día. He tenido la gran fortuna de topar con un grupo de gente súper colaboradora y participativa. Así da gusto. Si todos los fisios fueran iguales la gente tendría la sensación de que el colectivo de fisioterapeutas es así. Por eso pienso que lo mejor es que unos y otros colaboremos en beneficio de todos. También pienso que no debería haber guerras y no existir el hambre... así que posiblemente “Heidi” me haya marcado demasiado en mi infancia y hay determinadas cosas que me “chocan frontalmente”.<br /><br />Entiendo que el “marketing” en un negocio pase por intentar destacar sobre “la competencia”. Ahora parece que se lleva mucho lo “emocional” y todos tiramos del eslogan de “te sentirás a gusto, te sentirás bien”, “yes we can”, “impossible is nothing” y demás. Comprendo que uno en su web se diferencia apelando a lo que le decía a uno su abuela de pequeño respecto a que es “el más guapo, el más listo y el mejor del mundo mundial”. Uno tira de currículum y cual pavo real muestra sus cursos y fotos de sitios donde ha estado, porque parece que a la gente eso le gusta: “me trata el fisio del valdepeñas f.c”, “es el fisio del primo de la portera de la Estéban”...<br /><br />Lo que no me parece ético, ni profesional, es el hecho de desprestigiar al otro con el típico recurso de “lo mío no solo es mejor, es mucho mejor que lo que hace fulanito, que no vale para nada”. Me enciendo conforme escribo... “¡Uno, dos y tres... cuatro, cinco y seis... yo me calmaré, todos lo veréis...!” (respiro). Mejor. Pues como iba diciendo, el otro día en twitter por medio de una compañera me llega la siguiente imagen:<br /><br /><a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEisCXeJzFQj01Wt0Ln27XhvMikNDYPhY2wChkKWAidRLCuWTOkkQdPmoCzE-n9ei8aRsKn2Y3RBCUlxY5i7R72fzHveBDRm7JZ5H2Vn3e_5ppjWM0i8PTu1FO0wz_iHfMZprwmk/s1600/Captura+de+pantalla+2012-01-03+a+las+21.52.12.png"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 400px; height: 261px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEisCXeJzFQj01Wt0Ln27XhvMikNDYPhY2wChkKWAidRLCuWTOkkQdPmoCzE-n9ei8aRsKn2Y3RBCUlxY5i7R72fzHveBDRm7JZ5H2Vn3e_5ppjWM0i8PTu1FO0wz_iHfMZprwmk/s400/Captura+de+pantalla+2012-01-03+a+las+21.52.12.png" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5693737908961361570" /></a><br />Y ¿qué queréis que os diga? Me genera muchas reacciones diferentes. Por una parte, me causa cierta risa, porque me parece bastante ridícula e infantil una comparativa de ese estilo. Por otro lado siento lástima, porque me da pena que una persona pueda llegar a pensar así, porque demuestra un gran desconocimiento de lo que es la fisioterapia, y, que le pase a mi tía abuela, que la mujer tampoco tiene muy claro qué es un fontanero, lo entiendo, pero que le pase a un fisioterapeuta... ¡malo!<br /><br />Hemos vivido durante mucho tiempo un enfrentamiento “interno” fisioterapeutas y fisioterapeutas que han cursado un postgrado en osteopatía. Y este problema muchas veces ha venido fruto de una especie de “complejo de divinidad” infundado en muchas escuelas de osteopatía que, entiendo que a lo mejor hace 10 años tenía “algo” de base porque efectivamente la diplomatura de fisioterapia no destacaba (hablo de mi experiencia) por su extensa formación en el abordaje de la terapia manual, no. Pero que hoy por hoy en un congreso un compañero hable de una maniobra de manipulación y le añada la coletilla “osteopática”, pues no lo acabo de asimilar.<br /><br />Y mira que entiendo perfectamente que uno quiera amortizar su inversión. “Me he gastado X en formación y tengo que rentabilizarlo”. Correcto. Pero siguiendo con aquello de la “crisis de identidad”, creo que hoy por hoy el fisioterapeuta español no necesita a la osteopatía para poder llevar a cabo un buen trabajo. Ya hemos hablado del tema en otras entradas y en otros blogs así que no voy a repetirme.<br /><br />Si volvéis a mirar la foto... “¡Uno, dos y tres... cuatro, cinco y seis... yo me calmaré, todos lo veréis...!” (respiro). Mejor (creo).Si volvéis a mirar la foto se esta dando una información engañosa al público. Se le esta dando a entender que el abordaje que realiza el osteópata es mejor, más efectivo. ¿En base a qué se hace esta afirmación? ¿Desconocimiento/ignorancia? ¿Estrategia de mercado ergo publicidad engañosa?<br /><br />¿Yo trato a mis pacientes en grupos protocolizados? ¿Dedico apenas 10 minutos al paciente y mi tratamiento no es individualizado? ¿No uso mis manos?... ¿Pero con quién os estáis comparando? ¿Donde ponía Fisioterapia/RHB os referís a la que hacen en la parte más septentrional de Uganda? De verdad que alucino.<br /><br />Pretendemos mejorar la identidad profesional. Intentamos mejorar la base de nuestro conocimiento. Queremos ofrecer una imagen de profesión sanitaria actualizada, de colectivo cohesionado... este tipo de imágenes deben ser anecdóticas. Esto no puede venderse en ninguna escuela de ninguna formación. Ese tipo de actitud no beneficia absolutamente a nadie. Seamos humildes, seamos profesionales y seamos colectivo.<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com28tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-27467604830512269332012-01-02T08:54:00.003+01:002012-01-02T09:04:52.232+01:00Fisioterapia basada en la ciencia, ciencia basada en la evidencia y evidencia basada en ¿qué?<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgWxrxF4SKqkZ6D6ABYxFF7sK3KvGbl1xKN2VelKGd1XNqn6eRb1HtczmL7Sqsz2GW2c-HWYbr9pp35hKfZxdebyMRdCNcfO5TnRPoXVpGCiWY0xQMP1iDsc7PpFVkVwfS08RHp/s1600/pendulo.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 240px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgWxrxF4SKqkZ6D6ABYxFF7sK3KvGbl1xKN2VelKGd1XNqn6eRb1HtczmL7Sqsz2GW2c-HWYbr9pp35hKfZxdebyMRdCNcfO5TnRPoXVpGCiWY0xQMP1iDsc7PpFVkVwfS08RHp/s320/pendulo.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5692941545977554786" /></a><br />“Penduleamos”. Tendemos a ir de un extremo al otro de la balanza con demasiada facilidad. Las modas nos arrastran, o mejor dicho, nos dejamos arrastrar por las modas. Y suele suceder que renunciamos a nuestro fuero para adaptarnos completamente a lo nuevo, hasta que, pasado un tiempo, poco a poco dejamos de lado el extremismo de lo nuevo y verdaderamente integramos el nuevo conocimiento en nuestra manera de proceder.<br /><br />Esto sucede en todos los ámbitos. Pasa cuando realizamos una nueva formación y pasa cuando surge una nueva corriente de pensamiento. En esta entrada quiero hablar del proceso que vive la fisioterapia con la evidencia científica. La fisioterapia ha sido tachada por el resto de sectores sanitarios en muchas ocasiones como una pseudo-ciencia debido a la falta de aval científico en nuestro proceder. Recuerdo perfectamente unas Jornadas de Traumatología Deportiva en la Autoridad Portuaria de Valencia (hará ahora un par de años), donde se organizó una especie de mesa de debate entre traumatólogos deportivos y fisioterapeutas, donde se nos echó en cara la falta de rigor a la hora de aplicar los tratamientos, la falta de estudios que avalaran el uso de las técnicas y equipos que usamos en consulta, que fuéramos una profesión que se regía por el ensayo error y aplicábamos tratamientos que eran propios de la medicina y tomábamos como nuestros sin tener la capacidad de aplicarlos (en este caso hablaron en concreto de las infiltraciones). Nos soltaron alguna joya más como que necesitábamos una prescripción médica para poder aplicar el tratamiento que ellos pautaran y que por supuesto debía ir acompañado de un diagnóstico médico... (dejamos esto para otra entrada si os parece...).<br /><br />El caso es que efectivamente la fisioterapia (hablo de la que yo conozco) durante demasiado tiempo se ha regido por el “a mi me funciona” y esto ha propiciado que hayan surgido cientos de cursos donde cualquier vendedor de motos con un poco de visión de mercado ha ideado una grandísima bola de humo que respalda lo que él considera que a él le funciona. No hay necesidad de demostrarle nada a nadie. Y es aquí donde aparece el primer problema. El fisioterapeuta “medio” no tiene la menor idea de evidencia científica. Se nos llena la boca cuando hablamos de “Fisioterapia basada en la evidencia” pero la mayoría no sabemos leer un estudio. No sabemos interpretarlo. No tenemos la menor idea de cuándo leemos algo de calidad y cuándo leemos “simplemente” poesía.<br /><br />Y el cambio de paradigma es fundamental. Asumimos trabajar decidiendo en base a un uso racional, explícito, juicioso y actualizado de los mejores datos objetivos aplicados al tratamiento de cada paciente, es, obviamente el modelo a seguir. La medicina basada en la evidencia es un avance. Solo hay que mirar atrás y pensar en las “sangrías” que durante tantísimo tiempo fueron aplicadas en base a la creencia y no a la ciencia. La historia de la medicina actual esta plagada de situaciones que hoy nos parecen increíbles pero que hasta hace no demasiado eran el día a día. El uso de guantes en quirófano es de cerca de 1900, el hecho de lavarse las manos antes de atender un parto o una cirugía no llegó hasta pasado 1860...<br /><br />Ahora es lógico que exijamos ciencia a nuestra manera de proceder. Ya no “todo vale” porque “a mi me funciona”. Hay que demostrar que la actuación terapéutica tiene un mecanismo de acción más allá del placebo. Para ello la evidencia científica cuenta con un sistema jerarquizado basado en las pruebas o estudios de investigación, que ayuda a los profesionales de la salud a valorar la solidez de la evidencia asociada a los resultados obtenidos de una estrategia terapéutica.<br /><br />Aquí viene el problema principal. Copio y pego de “Arco”, que pese a que es clínico y considera sus conocimientos en la materia como “nivel usuario”, tiene mucho que enseñarnos: <br /><br />“El problema de la investigación en fisioterapia, parte principalmente de falta de muestras homogéneas para poder comparar abordajes, pero sobre todo de estudios que validen diagnósticos. Hay controversia hoy en día sobre si los RCT (estudios aleatorios controlados) son los apropiados para demostrar la eficacia de un tratamiento, o la superioridad con respecto a otro, precisamente por lo difícil de controlar lo alostático, a la par que lo homeostático.<br /><br />Pero principalmente, el problema es ¿qué medimos? Si hay hasta 17 definiciones diferentes de lo que es un síndrome de cola de caballo, cómo vamos a hacer un estudio donde veamos las pruebas diagnósticas clínicas para ello? Si a día de hoy no está claro qué es una ciática (no hay un consenso), ¿cómo vamos a definir la población diana y por lo tanto conseguir una muestra? Si el síndrome del piramidal es algo de lo que se habla, pero tampoco hay ninguna evidencia científica sobre su diagnóstico, y la que hay niega lo que conocemos como signos de la misma?<br /><br />[...] la técnica es lo de menos, es quién se beneficia de la misma, y esa pregunta a día de hoy no tienen respuesta. Hay reglas de predicción clínica que intentan reconocer esos tipos de pacientes que se puedan beneficiar de un ejercicio específico, de una manipulación o de establización, pero a día de hoy no han mostrado validez.”<br /> <br />[...] con mala investigación no me refiero a la metodología sino a lo que se investiga, a las premisas, a las muestras. Intentamos sobre todo investigar el efecto de una técnica específica en un problema inespecífico, e incluso comparar 2 técnicas específicas en una muestra heterogénea o en un problema inespecífico. Resultado, no concluyentes o no evidencia de. Eso es mala investigación, aunque la metodología sea excelente."<br /><br />Es decir, debemos promover la investigación y basar nuestra actuaciones en métodos y técnicas que demuestren tener el mayor nivel de evidencia disponible pero existen muchas limitaciones a la hora de realizar investigación. Y no solo en cuanto a los grupos heterogéneos. Muchas veces se investiga acerca de una técnica X y el que realiza la investigación es un absoluto desconocedor de dicha técnica. ¿Podemos valorar de manera objetiva el uso de un tape “Y” sin no sabemos aplicarlo? ¿La punción? ¿La centralización en base a diez extensiones lumbares?<br /><br />El estudio de casos clínicos creo que es una fuente interesante de conocimiento pese a tener un nivel de evidencia III (recomendación C, favorable pero no concluyente). Una figura de referencia para mi, el señor Bill Vicenzino, esta dotando de cuerpo sólido de conocimiento las movilizaciones con movimiento. Ha publicado en una revista como es el British journal of sports medicine, lo que viene a decir que se puede realizar investigación de calidad controlando correctamente las variables. En el caso de la epicondilalgia, las variables empleadas para formar parte del grupo de estudio están muy parametrizadas. No todo dolor lateral de codo es una epicondilalgia y eso permite valorar en qué grupo de pacientes funciona y de qué forma.<br /><br />Insisto en que soy un absoluto ignorante en la materia. Una de mis tareas pendientes es realizar estudios de postgrado con la intención de acceder al tercer ciclo y poder conocer completamente ese mundo que es el de la investigación (y a poder ser, aportar mi granito de arena, quién sabe). El caso es que como siempre aprendo tanto con vuestras aportaciones he querido sacar el tema a la palestra para que hablemos al respecto. Sabed perdonar mis incoherencias o posibles errores al respecto. Una última reflexión a la que ya hice mención en una entrada por medio de un enlace pero que ahora pego aquí directamente. Es un comentario que se hizo en el blog "Fisioterapia y Salud-os" en la entrada "Osteopatía y fisioterapia o fisioterapia y osteopatía".<br /><br />"La medicina basada en la evidencia tiene estas cosas. Se llama ciencia a cualquier idiotez. Es posible que muchos conozcáis la revisión Cochrane sobre el rezo intercesor (lo eficaz que es rezar por otro para que se cure). La evidencia es ciega. Últimamente hay interés, por ejemplo, en la utilización del TENS en el tibial posterior para tratar la incontinencia fecal. Se puede estudiar cualquier cosa: el padrenuestro frente al avemaría para el intestino irritable, la eficacia de contemplar atardeceres como tratamiento de la hepatitis crónica o dar palmadas como tratamiento del estrés. La evidencia es tonta. Por eso muchos tontos se apuntan a la evidencia, investigan tonterías y creen que hacen ciencia. Pero la ciencia es otra cosa. Puede haber Osteopatía basada en la evidencia pero nunca habrá Osteopatía basada en la ciencia."<br /><br />Un saludo.<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com15tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-30614190468455227182011-12-30T09:57:00.003+01:002011-12-30T10:20:26.778+01:00Hola Vicente soy tú... o ¡ya soy fisioterapeuta!, ¿y ahora qué?<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhAAi3_hFxY5Bp4ZRvSI4UVgdiqLNZ81aaP5vlDoIG-xxyc5zyjPUrBpKj_rTYWLOK2mBGTsTRZl90OxJ59TMzZ5_jTGnpxj3Hdg50EzIIUeConSRHAk7O97kF9K0ke8OlNszDm/s1600/cabina.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 177px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhAAi3_hFxY5Bp4ZRvSI4UVgdiqLNZ81aaP5vlDoIG-xxyc5zyjPUrBpKj_rTYWLOK2mBGTsTRZl90OxJ59TMzZ5_jTGnpxj3Hdg50EzIIUeConSRHAk7O97kF9K0ke8OlNszDm/s320/cabina.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5691847501025078898" /></a><br />“Hola Vicente soy tú. Tú mismo dentro de diez años. Sí, sí, escúchame. No te agobies con los exámenes. Te va a ir bien y trabajarás en lo que te gusta. Y créeme, con el paso del tiempo, cada vez te gustará más. No te preocupes por esa sensación de no saber absolutamente nada. Los cursos de postgrado, el trato con el paciente y sobre todo la experiencia te irán haciendo sentir cada vez más seguro en consulta. La rama deportiva es muy interesante y como fue lo que te motivó a empezar esto, te recomiendo que pases por ahí, pero has de ser consciente que pocos pueden vivir del deporte de élite y que requiere mucho sacrificio: entrenamientos mañana y tarde, viajes fines de semana alternos, campeonatos... además, si lo que te gusta es el trato con la gente acaba siendo un poco “repetitivo”. Los mismos jugadores, las mismas bromas... pasa el tiempo, creces, cada vez te parecen más “críos” y la dinámica acaba cansando, pero has de vivirlo para darte cuenta que a ti no es lo que te llena.<br /><br />El mercado laboral esta muy complicado. Las alternativas que se contemplan siempre en un primer momento son: Francia (y los dos sabemos que no nos apetece nada dejar atrás a la familia), montar una consulta (¿nada más acabar?... complicado) o buscar trabajo donde sea. Empezarás con lo primero y eso te permitirá conocer de primera mano cómo se trabaja en una mutua, una pequeña clínica privada y un equipo deportivo. Créeme si te digo que acabarás combinando el ámbito privado y el docente (tiempo al tiempo). La limitación de trabajar para otros es que no siempre te permiten “crecer” en el aspecto que te interesa: no puedes pinchar, no puedes usar esos ganchos...así que, emprendedor que es uno, acabarás a tu pesar con tu propia pequeña empresa. Siempre pensaste que el cocinero debe atender a los fogones y el metre el comedor... pues bien, no te quedará más remedio que hacer facturas y recortar gastos. Para ello, pese a que existe una grandísima saturación del mercado laboral y hay casi tantos centros de fisioterapia como bazares del todo a cien, si tienes claro lo que quieres no te va a quedar otra que arriesgar. Muchos, con el tiempo, te echarán en cara que ha sido gracias a los "papás" que te lo han pagado, pero eso es porque ahora los bancos ya no regalan el dinero como lo hacían antes y lo de que te avale el propio banco pues... como que ya no te avalan ni aportando más dinero del que quieres pedir... ¡aprovecha el momento!<br /><br />La vida del autónomo no es fácil en absoluto pero la experiencia acumulada hasta la fecha será suficiente para que tengas soltura a la hora de tratar a los pacientes. Recuerda que nunca podrás dejar de hacer formación. No porque tengas que estar al día. Porque estás “enfermo” y no puedes dejar la fisioterapia ni para irte tranquilo a dormir. Tu cuñado, que se acabará licenciando en educación física (entre otras cosas) te hará la planificación de las carreras que vas a correr cada año (si hijo, al final correrás con asiduidad) y tú por tu parte tendrás tu planificación de congresos y cursos para el año... así de friki.<br /><br />Hay muchísimos cursos en el mercado. La formación es un negocio y hay que saber escoger correctamente. Encontrarás centros donde se ofrece formación de mucha calidad como Forinfis (que desgraciadamente cerrará), <a href="http://www.fortema.es/">Fortema</a> y <a href="http://www.zerapi.com/">Zérapi</a>. Harás cursos muy interesantes (como la formación Maitland, McKenzie, Mulligan...) pero también encontrarás cursos que te aportan más bien poco (Sohier, por ejemplo). Lo más importante es que te sientas cómodo con aquello que practicas puesto que vas a dedicarle muchas horas. Ojo al ADEIT de la UV que gracias a la gente de la <a href="http://sites.google.com/site/sefidsp/">SEFID</a> vas a tener de nuevo formación de mucha calidad en Valencia.<br /><br />Vivirás muchas “transiciones” como terapeuta y verás que durante diferentes etapas entrarás en una especie de bucle donde lo que dabas por sabido y entendías bien deja de tener mucho sentido, te sentirás confuso y comprobarás que cada día que pasa sabes un poco menos hasta que las piezas del puzzle encajan de nuevo. Es cíclico. Te acostumbrarás.<br /><br />Una de las cosas que más te van a aportar a nivel tanto profesional como personal es internet. Gracias a él harás grandes amigos (océano-mar, c2rganchosforever) y conocerás nuevas formas de entender la salud. En concreto cuando después de leer “¿Por qué las cebras no tienen úlceras?” y conocer el “NOIgroup” y leer “Explain Pain” conozcas al Dr. Arturo Goicoechea (grandísimo hombre) sufrirás uno de esos debacles cerebrales de los que te he hablado antes. Tranquilo, te repondrás y muchas cosas empezarán a tener sentido. Prepárate para estudiar muchísimo el mundo de la neurociencia. Por cierto, acuérdate de grabar el documental ese del canal Odisea donde habla un neurocientífico indú del miembro fantasma que te hará falta para montar el puzzle (que lo habrás visto ya un par de veces pero sin el fenómeno “ajá”... ya me entenderás...).<br /><br />Internet te dará a conocer también a un montón de compañeros que comparten de manera gratuita y sin complejos sus experiencias y pensamientos, su día a día gracias a sus blogs (tú también tendrás uno... intenta no descuidarlo demasiado). Atención especial a <a href="http://arturogoicoechea.wordpress.com/">"Arturo Goicoechea"</a>, <a href="http://desdeoceanomar.wordpress.com/">"Océano Mar"</a>, <a href="http://estonotienebuenapinta.blogspot.com/">“Esto no tiene buena pinta”</a>, <a href="http://rubentovar.blogspot.com/">“Fisioterapia y demás”</a>, <a href="http://osteonfisioterapia.blogspot.com/">“Osteón Alaquàs”</a>, <a href="http://www.fisioenap.com/">“Fisioterapia en atención primaria”</a>, <a href="http://www.arturosuch.com/movimentisalut/">“Moviment i salut”</a>, <a href="http://fisioaso.blogspot.com/">"Fisioterapia y Salud-os"</a>, <a href="https://fisioterapiayfutbol.wordpress.com/">"Fisioterapia y fútbol"</a> y muchos otros que irás conociendo con el tiempo. Allí aprenderás muchas cosas y mantendrás más viva si cabe esa llama incombustible (además de conocer proyectos muy interesante fruto del trabajo de la inteligencia colectiva).<br /><br />Mi consejo es que ahora que empiezas te "peques" a gente que ya lleva tiempo en esto y te dejes guiar. La voz de la experiencia es siempre muy interesante de escuchar. Rodéate siempre de buenos profesionales y las cosa siempre te irán bien. No te agobies cuando oigas hablar de crisis. Entenderás a qué se refería Homer Simpson con eso de la "crisistunidad". Hay cabida para la fisioterapia en los centros deportivos. Habla con la gente de <a href="http://www.alfafisioterapia.com/">"Alfa fisioterapia"</a> (¡qué grande esa gente!). Ya entenderas eso del espíritu de <a href="http://www.centrosupera.com/index.php?id=156">"superación"</a>.<br /><br />¡Ah! España ganará el mundia, pero te importa un carajo porque el fútbol te la trae al pairo... eso no va a cambiar con los años.<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com23tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-9200120473953224562011-12-27T13:14:00.002+01:002011-12-27T13:17:51.907+01:00Cosa de enfermos, enfermedades y sanitarios<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEha5ljNIg03IPKlH6xvTLZz07RcdQNeJZvU21ZXJY2dA4ZxR-jqYbun3tDlefFEHbrZ1JI-40igA9Q4-U-a5GZE0O3-RVXmSY7iR9_O0-Rs8OvySqZIPsCqbMq7LpzXsS3P4Rry/s1600/abrazo.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEha5ljNIg03IPKlH6xvTLZz07RcdQNeJZvU21ZXJY2dA4ZxR-jqYbun3tDlefFEHbrZ1JI-40igA9Q4-U-a5GZE0O3-RVXmSY7iR9_O0-Rs8OvySqZIPsCqbMq7LpzXsS3P4Rry/s320/abrazo.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5690781142476443394" /></a><br />Me llama la atención que surjan “movimientos” pro-mejora de la atención del paciente. Y me llama la atención sencillamente porque creo que es algo que a día de hoy debería ser completamente innecesario. Sabiendo lo que sabemos, el profesional sanitario debería saber el efecto que produce, las expectativas que genera, las consecuencias que tiene lo que le dice al paciente, cómo se lo dice...<br /><br />Trabajo en un ámbito de actuación con un marco diferente. En “la privada”, y más en clínicas pequeñas como la mía, somos un “restaurante familiar” y nuestro objetivo es que quien entra se sienta uno más en la mesa. Bajo un prisma profesional, intentamos que cada individuo se sienta ante todo cómodo y respetado, libre y a la vez partícipe. Procuramos que aquello que muchas veces se nos ha echado en cara de que un paciente no es “una rodilla” o “un hombro” sea completamente cierto.<br /><br />Y es que en el ámbito sanitario una de las cosas más importantes es la empatía, que la RAE define como: “Identificación mental y afectiva de un sujeto con el estado de ánimo de otro.” Y que sería algo así como “poner en el pellejo del otro”. Y aquí otro punto de conflicto, puesto que el personal sanitario debe “escudarse” y no “entrometerse” en la vida del paciente puesto que de otro modo no sería sano ni objetivo en la toma de decisiones. Es cierto que muchos profesionales son incapaces de tratar a los miembros de su familia y prefieren que lo haga otro de su confianza. El hecho de que cada usuario se convierta en un familiar es algo metafórico (me adelanto a los comentarios), simbólico.<br /><br />Yo, además de eterno estudiante de fisioterapia, soy “paciente crónico” con una minusvalía (“preciosa” palabra) del 41%. Eso significa que para llegar a un diagnóstico, en este caso “enfermo de Chron”, me han hecho muchas pruebas, he pasado por muchos profesionales diferentes y, durante el transcurso de “mi enfermedad”, me han ingresado casi una docena de veces (cirugía incluida). Y doy gracias por ello. Es fundamental conocer las dos caras de la moneda. Y yo he vivido de primera mano la diferencia sutil de quien te llama por tu nombre, o te saluda con una sonrisa después de estar 14 días asqueado en la cama de un hospital, a quien te pincha sin siquiera hablarte, enciende “los focos” que apuntan hacia la cara mientras duermes a las cuatro de la mañana para tomarte la temperatura.<br /><br />Es importante conocer qué se siente al otro lado. El miedo, la incertidumbre, la indefensión. Cuando uno es desconocedor de qué le sucede, por qué le sucede, pone todas sus esperanzas en el señor/a con bata a la espera de obtener mejora, de sanar, de volver a la normalidad. Porque cuando uno se siente enfermo no puede hacer vida normal. Lo único que quiere es estar tumbado, tapado y en silencio. El programa enfermedad se activa para que los tejidos sanen y, del mismo modo que el sistema nervioso simpático actúa en el mecanismo de lucha-huída, el parasimpático se activa para dar lugar al reposo necesario para la correcta sanación de los tejidos. Al final es siempre lo mismo. Una amenaza potencial de daño consumado activa las alertas nociceptivas que activan el programa dolor. <br /><br />Recuerdo a mis 17 años, absoluto desconocedor de qué demonios me sucedía jugando a fútbol en pleno “brote”, haciendo fuerza con el antebrazo para “sujetarme la pancha” y corriendo mientras me quejaba... pero sin dejar de jugar. Años después, en el momento que iba al baño y veía sangre en la taza del water, el mundo se me venía encima. Absoluto bajón. De nuevo enfermo. A pasar por todo otra vez. Entra en juego el factor “cultura”, experiencias aprendidas, mi pasado, los nuevos conocimientos respecto al tema... y entonces la manera de afrontarlo era diferente. Buscaba rápidamente a mi médico para que me medicara y me recetara cama hasta volver a la normalidad.<br /><br />Me mandaron un tratamiento “de por vida” con inmunosupresores a los 25 años de edad. Una dosis tan baja que apenas hacía efecto según mi doctora, pero cuando intentaban subirla el hígado se sublevaba teniendo que bajarla al mes siguiente. Finalmente, tras una larga charla con mi doctora asumí dejar la medicación puesto que entendía que entre tomar una dosis “de mantenimiento” y no tomar nada tampoco había demasiado diferencia... ¿para qué entonces tener que tomarla?<br /><br />Arturo en alguna ocasión ha categorizado el colón irritable como un proceso de sensibilización al igual que la migraña o la fibromialgia. Soy un completo desconocedor del tema, pero lo cierto es que “mi enfermedad” tiene muchísimo que ver con lo que él describe. Y con el tiempo he observado errores en los patrones de mi comportamiento que favorecían o facilitaban determinados desencadenantes y viceversa. Hoy puedo decir que me siento un sujeto total y completamente sano, pero que cuando en algún momento puntual siento algún “extraño” en “mi zona intervenida”, me acojono (disculpe el lector la expresión, pero es la que mejor define mi sensación). No trasciende más, pero cuando me cuesta levantarme de la cama por dolor, me hago pequeño y las cosas me cuestan mucho más. Y de nuevo agradezco esa sensación porque a veces se me olvida lo fácil que es “exigir” más esfuerzo a un paciente, enfadarme porque no ha entendido mi mensaje porque no he sabido explicárselo correctamente. Y no. No es solamente eso. Es que un sujeto enfermo no se siente como un sujeto sano, del mismo modo que un sujeto deprimido no se siente como un sujeto sano.<br /><br />Y es cierto que el hecho de haber asumido ciertos cambios en la manera de interpretar mi afección han mejorado mucho mi calidad de vida. Y que con los avances en neurobiología he podido entender o dar base a muchas de las cosas que llevaba haciendo hace tiempo. Es importante que seamos conscientes que trabajamos con un sector de población muy particular, con gente que esta enferma. Y merecen, de nuevo, nuestro respecto, atención y profesionalidad, con un grado de empatía que nos permita saber cómo actuar y a qué se debe su miedo o su falta de movimiento.<br /><br />Cuando viene algún estudiante a la clínica lo primero que quieren hacer el “pinchar”. Una de las técnicas posiblemente más atractivas para muchos sea la punción seca. Pues bien, para pinchar uno no debe olvidar la sensación de ser pinchado. Lo mismo con cualquier abordaje. Nosotros necesitamos saber si lo que siente nuestro paciente es o no normal. <br /><br />Es fundamental empatizar en mayor o menor medida con quien tenemos enfrente para poder entendernos correctamente.<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com21tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-68573224781480996772011-12-26T20:32:00.002+01:002011-12-26T20:48:33.497+01:00De límites, falta de consenso y el sistema de movimiento<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjRYaSFBG_usmMfn_Z2vht0mwYemFFtQy_jTlsmbDGvcz_IFoJ22EIgPt8tOEskisyv_20dokFwlzkn1-QXz9KXWsSllzNGRXo6BKaISACM6v9yh85pbepERI5mjmzzd89KypWC/s1600/duda.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 296px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjRYaSFBG_usmMfn_Z2vht0mwYemFFtQy_jTlsmbDGvcz_IFoJ22EIgPt8tOEskisyv_20dokFwlzkn1-QXz9KXWsSllzNGRXo6BKaISACM6v9yh85pbepERI5mjmzzd89KypWC/s320/duda.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5690522964518552706" /></a><br />“La tragedia en la vida no consiste en no alcanzar tus metas. La tragedia en la vida consiste en no tener metas que alcanzar.”<br />Benjamin E. Mays<br /><br />Uno de los problemas que veo yo en cuanto a la duda existencial del fisioterapeuta es la falta de definición de su parcela de trabajo o área de actuación. No esta claramente definida y ese “campo excesivamente abierto” da lugar al libre albedrío profesional. Cada uno se dedica a lo que más le apetece, porque, parece que tenemos claro que el nexo de unión es la sanidad. Somos profesionales sanitarios y como tales nos dedicamos a la promoción y recuperación de la salud de aquel que acude a nosotros. El problema viene a la hora de “aplicarlo” o llevar el concepto a la práctica. Esa falta de definición conlleva que uno trate al paciente mediante flores, brebajes, píldoras mágicas... cada uno en base a una verdad operativa inspirada por una corriente de pensamiento determinado. Sobre este tema hay una entrada sumamente recomendable de mi gran amigo y compañero <a href="http://desdeoceanomar.wordpress.com/2011/06/05/crisis-de-identidad/">océano mar</a> y por tanto no voy a seguir en la misma línea argumental porque el se expresa mucho mejor que yo y hay que dejarle tiempo para que prosiga con su línea argumental. Pero sí que, aprovechando que Carlos va a hablar de un curso cuanto menos “misterioso”, quisiera intentar ubicar un poco nuestra desubicada cabeza.<br /><br />Como absolutamente todo, nos movemos por las modas. En su momento la fisioterapia bebió de la osteopatía y la estructura predilecta fue la articulación. Luego el músculo volvió a ocupar un papel estelar que la fascia le arrebató posteriormente, la movilidad del sistema nervioso y ahora el cerebro y la red neuronal. Los “seguidores” entonces como técnica predilecta manipulaban, masajeaban, gancheaban, movilizaban, estiraban, inducían, pinchaban... y durante un tiempo “no hacían nada” (que diría José Mota). Hubo un breve lapso de tiempo en que algunos compañeros preconizaban el “hands-off” como estrategia de actuación ante determinado grupo de pacientes.<br /><br />Estamos entendiendo e integrando el conocimiento sobre la red neuronal, sobre lo “BIO” que defiende Arturo incluyendo lo educacional, lo cultural, lo emocional además de lo estructural. Pese a que siempre hemos sido una profesión muy holística, lo hemos sido de una manera bastante mística y ahora parece que empezamos de verdad a incluir al individuo dentro de ese conjunto que parecía más una figura de “Lego” que un ser vivo. Y por ende, nuestros abordajes clínicos están evolucionando y cosas que antaño realizábamos en base a la intuición tienen ahora un sustrato teórico consistente basado en lo que la ciencia va evidenciando.<br /><br />Pero creo que es necesario recalcar nuestro marco de actuación. Somos fisioterapeutas y nuestro cometido es el de restablecer/normalizar las alteraciones y disfunciones del movimiento. Y ese es nuestro sistema. Y eso implica muchísimas cosas porque el movimiento forma parte de la acción, que viene precedida por la percepción. Los sistemas se integran porque efectivamente somos un todo y no hay nada que no funcione bajo la incombustible batuta del cerebro. Pero no tratamos de manera exclusiva la percepción y evaluación del paciente, no nos dedicamos al ámbito emocional y no debemos extrapolar nuestra área de actuación en base a las modas. En breve saldrá a la televisión una serie donde un fisioterapeuta hará de peudo-para-psicólogo porque para mucha gente nuestra actuación es algo parecido a eso, porque verdaderamente hay fisioterapeutas que se dedican a eso.<br /><br />Seguimos siendo parte de un conjunto (o deberíamos sentirnos parte de un conjunto). Seremos una pieza clave en la rehabilitación, pero nunca seremos los únicos (ni lo pretenderemos). Nuestra preocupación, de nuevo, la relacionada con la función, con la acción, en concreto, con el movimiento. Porque el fisioterapeuta no es ni debe ser el experto en dietas o en el uso de las mismas como herramienta terapéutica. Tampoco en la aplicación de fármacos (de los de verdad u homeopáticos), cristales, música... <br /><br />Tenemos un sistema en el que centrarnos, unas herramientas diagnósticas válidas y un arsenal terapéutico amplio y cada vez más consensuado. Dicen que nos falta definirnos. Lo que falta es “conocimiento” y este debe promoverse desde las universidades. Lástima que allí hayan demasiados intereses creados (de los “crematísticos” que dice océano)... por suerte el colegio profesional no tiene de eso... (GLUP!)<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com7tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-77212431814551098192011-12-21T13:52:00.002+01:002011-12-21T13:56:35.649+01:00Dependencia independentista pediente de independizarse (o locus de control interno)<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhVL6W6uUa0io8ZSYd97pMQ2u_2fASKzJHfQhwiJvupOIPILEI1RLHEPoOBjctg49GlU3MYP8ReP8Krs_rTVCTH0ejHSVgF5P5SpA1oTsipMuFR5U3oqRanJ5rzhLpKLAG_zRba/s1600/autosuficiencia.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 300px; height: 260px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhVL6W6uUa0io8ZSYd97pMQ2u_2fASKzJHfQhwiJvupOIPILEI1RLHEPoOBjctg49GlU3MYP8ReP8Krs_rTVCTH0ejHSVgF5P5SpA1oTsipMuFR5U3oqRanJ5rzhLpKLAG_zRba/s320/autosuficiencia.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5688564586902357234" /></a><br />Uno de nuestros objetivos principales en consulta debe ser fomentar la autoeficacia, la autosuficiencia y la independencia respecto a la terapia y el terapeuta. Este es un tema “delicado” en el ámbito privado, puesto que afecta de manera más o menos directa al bolsillo a corto plazo.<br /><br />La figura del especialista es controvertida. Lo hemos hablado en diferentes entradas y comentarios. “Los expertos”, como suele decir Arturo, son figuras de referencia en un campo. Pueden estar más o menos acertados, porque la ciencia avanza cada día y existen muchas corrientes de pensamiento diferentes respecto a un mismo asunto. Un individuo, cuando acude a un profesional sanitario en calidad de paciente, deposita en él su confianza y se dispone a seguir a “pies juntillas” el tratamiento (si encuentra, parafraseando a océano mar, respuesta satisfactoria en el mismo).<br /><br />Existe un pensamiento generalizado de tratamiento mediante terapia pasiva, en la cual el paciente no tiene más que “dejarse hacer”. Este enfoque supone un grave error conceptual y ha sido favorecido en gran medida a consecuencia del “hermetismo” de la comunidad médica en general. No se solía dar apenas información al paciente y, por supuesto, era preferible que no hiciera nada más que lo que se le recomendase expresamente. De hecho, nuestro sistema sanitario suele recurrir, por falta de tiempo y muchas veces de recursos, a la “receta fácil”, farmacología y reposo.<br /><br />Muchos casos clínicos están autolimitados y del mismo modo que han “aparecido” desaparecen sin dejar secuelas. El tiempo de evolución de cualquier patología es fundamental porque en poco tiempo se produce unas sensibilización periférica que acaba facilitando una sensibilización central. Hay cambios a las pocas horas de instauración y con el tiempo se van “complicando”.<br /><br />Con el avance del conocimiento en el campo de las neurociencias hemos ido dando un sustrato teórico a algo que hacíamos por “coherencia” que era dotar de herramientas al paciente mediante ejercicios, explicarle nuestras hipótesis basadas en las verdades operativas para que fuera partícipe del tratamiento, que se hiciera responsable de su mejora. <br /><br />Robert Sapolsky habla en su, para mi, genial libro, “¿Por qué las cebras no tienen úlceras?” de ensayos con ratas para medir el estrés y sus consecuencias en el organismo, de cómo varía el nivel de estrés en función de la “sensación” de poder ejercer algún tipo de control sobre tu situación. En concreto habla del caso de una jaula con el suelo electrificado en el cual dos ratas separadas por un muro, sufren descargas de manera aleatoria sin posibilidad de hacer nada al respecto. Posteriormente a una de las particiones de la jaula se le incluye una pequeña palanca que permite que al presionarla interrumpe el flujo de corriente en la totalidad de la jaula, es decir, ambas ratas dejan de sufrir de igual manera la dichosa corriente. Y en una tercera variante, desconectan el interruptor de manera que al presionarlo no sucede absolutamente nada.<br /><br /> Pues bien, la rata que tiene la palanca en su parte de la celda tiene menos cambios fisiológicos debidos al estrés que la que no tiene posibilidad de interceder entre su destino y la corriente. De hecho, incluso cuando la palanca no tiene ningún efecto en la corriente, la rata que la presiona de manera desesperada intentando impedir que suceda lo inevitable muestra un nivel inferior de estrés que el autor relaciona con “¡Dios mío, si estoy padeciendo lo que estoy padeciendo pese a pulsar la dichosa palanquita, imagina la que me caería de no hacerlo!”.<br /><br />Otros estudios de diferentes características se han llevado a cabo con pacientes que requieren altas dosis de analgésicos donde se les permite solicitarlos cuando los necesiten en lugar de tenerlos pautados y se ha observado que requieren menor cantidad de fármaco que los que lo tienen bajo orden médica.<br /><br />Y ¿a dónde quiero llegar?. Pues quiero hablar del “locus de control interno”, que es lo contrario al “locus de control externo” donde esperamos (o damos por hecho) que alguien de fuera va a solucionar nuestro problema. Si explicamos correctamente y de manera que el paciente entienda qué es lo que vamos a hacerle y por qué, si le damos unas pautas y unas herramientas de trabajo y éste entiendo cómo y cuándo ha de realizarlas, en qué medida va a influir en su mejora, entonces conseguiremos que el paciente sea participativo, se sienta parte fundamental (que lo es) en su mejora, y fomentaremos una independencia que es de vital importancia.<br /><br />Carlos en su última entrada hablaba de una hipotética conversación terapeuta-paciente haciendo mención expresamente (todo esto en base a lo que yo entendí, el autor puede tirar de mis orejas a gusto) al cambio necesario entre un paciente que “se deja hacer” y un terapeuta que quiere un tratamiento más eficaz que no se base en la aplicación de técnicas sin más, si no que incluya en primer lugar la pedagogía y participación de éste como pieza clave de su recuperación.<br /><br />A mi me hizo pensar en la dependencia paciente-terapeuta. Hay paciente que pese a haber obtenido una completa mejoría insisten en una especie de “mantenimiento”, unas sesiones periódicas a modo de recordatorio, de “seguir estando bien”. Insisto en que al comienzo dije que es un tema polémico porque hay terapeutas que dicen que es bueno para el paciente y mejor para el bolsillo, pero, pese a que no debes negarle a un paciente la posibilidad de recibir tratamiento, uno debe dejar claro desde el comienzo y reforzarlo de manera periódica que lo mejor para una correcta evolución y evitar recidivas en el futuro es fomentar el automanejo, la autosuficiencia y la autoeficacia, bajo supervisión, pero sin dependencia.<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com14tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-71424984240553335392011-12-14T02:51:00.002+01:002011-12-14T02:55:38.289+01:00Where is the limit? (¿Dónde está el límite?)<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgKF15H-OsM467-N8nsu6iRteG6txH9NdOBSvqXXPsJRn4nI4Qytq0IMKaKmawWR1bab_fqhmDgnhbXRzab8E0814wpJEkQLJ05URc2wJ0V-wwqGvy1I0GuGaG2HwpHlRo61SCd/s1600/poster-run-witl-1.jpeg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 289px; height: 400px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgKF15H-OsM467-N8nsu6iRteG6txH9NdOBSvqXXPsJRn4nI4Qytq0IMKaKmawWR1bab_fqhmDgnhbXRzab8E0814wpJEkQLJ05URc2wJ0V-wwqGvy1I0GuGaG2HwpHlRo61SCd/s400/poster-run-witl-1.jpeg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5685796274376199874" /></a><br /><br />En mi práctica clínica me he encontrado con muchísima gente diferente. Cada uno con sus creencias, actitudes, entorno, cultura... y con el tiempo he sabido valorar lo muchísimo (o “todísimo”) que influye en el sujeto. El hacer al paciente partícipe de su proceso de recuperación, dotarle no solo de herramientas, si no del control, es fundamental y demuestra mucho mejor resultado no solamente en padecientes de larga evolución si no en gente con patología de todo tipo.<br /><br />He tenido la gran suerte de encontrar, gracias al <a href="http://aprendiendofisioterapia.blogspot.com/2011/03/el-reto-de-cero-cien.html">“reto de cero a cien”</a> a un grupo de gente con las ideas más claras de lo que puede parecer a simple vista, con los que comparto una misma filosofía de vida: <a href="http://www.whereisthelimit.com/">¿dónde está el límite?</a>. ¿Hasta dónde somos capaces de llegar? ¿En qué momento podemos decir que hemos llegado a nuestro tope? “No, yo no soy capaz de...” ¿Por qué?<br /><br />Si seguimos abordando de manera dual el binomio cuerpo-mente, podemos suponer que el límite viene marcado por nuestra “capacidad” para ejecutar una acción. Si no soy capaz de correr 80 kms. es porque mis articulaciones no están adaptadas a esa carga, mis músculos no soportarían hoy por hoy esa fatiga a la que los sometería, mi fisiología no ha sido previamente “enseñada” a responder ante ese tipo de situaciones. Pero... ¿y mi cabeza? Diariamente me encuentro con pacientes que me dicen: “no puedo correr más de cinco minutos...”. Cuando les preguntó que por qué, la mayoría no tienen un argumento razonable más allá del... “no se... simplemente no puedo”.<br /><br />Con constancia, un entrenamiento bien guiado y supervisado por un profesional que nos planifique nuestra actividad en base a nuestros objetivos, podemos preparar nuestro andamiaje para cuantas “perrerías” nos propongamos. Además hace falta conocimiento. Uno debe ser consciente de que el límite lo marca uno mismo. Que lo que más dificulta nuestro avance son las zancadillas que nos ponemos nosotros mismos.<br /><br />Cuando profundicé en el estudio de la pedagogía del dolor, en el área de la neurociencia, llegué a planteamientos y conclusiones muy similares a los que ésta gente se plantea. ¿Dónde esta el límite? Yo no se donde está el mío... pienso averiguarlo. Y tú, paciente, compañero o amigo se consciente de que tu límite solo lo fijas tú y seguro que con el trabajo adecuado eres capaz de superarlo.<br /><br />Para la gente que quiera unirse al club, hoy miércoles 14 de diciembre tenemos previsto hacer una <a href="http://josefajram.es/where-is-the-limit-run-en-valencia/">salida aquí en Valencia</a>, desde el Saler (polideportivo de el Saler, nada que ver con el centro comercial de el Saler) a las 20.00. Estáis todos invitados. Lo único que se necesita es motivación y equipamiento (zapatillas, cortaviento que hará frío y un frontal porque no hay luz).<br /><br />¿Sabes dónde está tu límite?<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com11tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-33285405404581495092011-12-09T12:59:00.009+01:002011-12-12T08:14:25.185+01:00Objetivar resultados (o mediciones objetivas)<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjTRtXwbkgU-RDVADugxaeFIkXw13_5svqyGInbF_c8m3K99p7H8LyKuu9InNFL1lBy17AAj_nXJ3ejTxB-TTXFWda0Me6fHS90yl2UiEWGpcJXpR4fwCo3rxZfpnX1SGXq77Ai/s1600/objetivar.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 250px; height: 250px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjTRtXwbkgU-RDVADugxaeFIkXw13_5svqyGInbF_c8m3K99p7H8LyKuu9InNFL1lBy17AAj_nXJ3ejTxB-TTXFWda0Me6fHS90yl2UiEWGpcJXpR4fwCo3rxZfpnX1SGXq77Ai/s320/objetivar.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5685136801708201602" /></a><br /><br />Cuando empecé a correr, hacer 8 kms. era todo un “desafío”. Mis rodajes se fueron haciendo progresivamente más largos y finalmente, como dije hace poco, terminé mis primeros 42 kms. Cuando me pregunta algún paciente o me comenta algún amigo, muchos dicen: “¡qué barbaridad! ¡esa distancia es una locura! ¡demasiado tiempo para estar corriendo!”. Claro que luego veo las pruebas que llevan a cabo otros corredores, o nadadores, o ciclistas, o todo junto, y pienso “¡si eso no es nada!”. El sábado un grupo de apasionados se embarcó en un doble ironman clandestino: 7.600 m a nado, 360 kms. de bici y 84 kms. corriendo...<br /><br /> Y esto quiero simplemente plasmarlo a modo de introducción para enlazarlo a colación del caso clínico con el que empecé hace dos entradas. No voy a extenderme ahora con el "relativismo", pero sí con la importancia capital de la objetivación relativa. Me gustaría hacer una reflexión acerca de la objetivación de mediciones. Es importante primero recordar el concepto de "verdad operativa" y "verdad verdadera" del que ya hablamos <a href="http://aprendiendofisioterapia.blogspot.com/2010/12/subjetiva-objetividad-subjetivada-al.html">aquí</a>. La hipótesis ("mi" hipótesis en base a la pruebas realizadas y los resultados obtenidos) es "alteración femoro-patelar". La forma de llegar a esa conclusión es: cuando testo la articulación F/P provoco sus síntomas, lo identifica como su dolor, la medición de la posición de la rótula me indica que existe una desviación lateral significativa, la EMG evidencia un "imbalance" VM-VL y, lo más importante para mi, el hecho de provocar cambios a nivel F/P por medio de movilización primero y tape posteriormente, condiciona una mejora en la clínica de mi paciente.<br /><br />Creo que es importante que tratemos de objetivar nuestras valoraciones. Cuando hice el curso de "tratamiento de la epicondilalgia" con Vicenzino, éste usaba un dinamómetro de presión para cuantificar el PFG ("pain free grip" o presa libre de dolor). La finalidad, al igual con el resto de MWM (movilizaciones con movimiento) era comprobar que la maniobra provocaba cambios objetivables. Si al realizar mi maniobra consigo una mejora significativa objetivable, podemos cuantificarla y no basarnos solamente en la VAS.<br /><br />Una de las cosas que la "nueva" fisioterapia debe ir incorporando progresivamente en su manera de proceder es objetividad. La ciencia mediante la evidencia nos provee de cuestionarios y test objetivables. En no mucho tiempo llegarán los cuestionarios dinámicos: aplicaciones para tablet, ordenador y móvil con cuestionarios que en base a las respuestas del paciente plantee nuevas cuestiones seleccionadas a modo de diagrama de flujo. Si nuestros abordajes se basan en mediciones objetivas además de pruebas objetivas y cuestionarios objetivos, nuestro tratamiento será más "verdadero" y seguro llegaremos mejor a conclusiones similiares.<br /><br />Si por ejemplo, ante un paciente que en la valoración nos dice que tiene dolor en la rodilla, que el hecho de estar mucho tiempo sentado le incomoda, que necesita mover las piernas, que actividades con carga incrementan su dolor, que esta localizado en la cara anterior de la rodilla, que descarta, al menos desde la teoría, implicaciones de cadera o espalda, nos llevan a sospechar que una de las posibles fuentes de su dolor es la articulación F/P, deberíamos de proceder de manera similar, en base a lo que la evidencia hoy por hoy nos ofrece. <br /><br />Tras la estática valoro la marcha, squat bipodal, unipodal, escalón, salto... todo dependiendo de si consigo o no reproducir los síntomas del paciente. Si necesita correr X tiempo antes suelo mandarle a correr antes de venir a consulta... depende.<br />Ya en la camilla test dinámicos para valorar ROM y añadir sobrepresión. Test accesorios<br />(con leve flexión de rodilla) presión antero-posterior de la rótula, desplazamientos laterales. EMG. Palpación de partes blandas. Creo que poco más. <br /><br />Lo ideal seguir un protocolo de actuación validado. Siempre he sido un "renegado" de la protocolización, pero lo cierto es que hay que entender esto dentro de un contexto. No se trata de trabajar de la misma forma con todo el mundo, pero hay que intentar seguir un "modus operandi" e individualizarlo al máximo. Creo que va siendo hora de pulir aquello de "arte" que tanta confusión genera dentro de nuestra definición como profesión.<br /><br />¿Y tú? ¿Sueles objetivar resultados?<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com9tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-62036212758739683442011-12-05T11:56:00.003+01:002011-12-05T11:59:46.215+01:00A propósito del caso de la entrada anterior (o seguimos para bingo)Bueno, sigo con el caso clínico que propuse el otro día en la historia. Como dije en los comentarios, es algo que hace tiempo quería hacer. De hecho, en futuras ocasiones lo que haré será colgar historias incompletas o tratamientos abiertos para tratar de llegar a algún tipo de consenso.<br /><br />En el caso que nos ocupa, cuando el paciente me marca su área de dolor en el “mapa corporal” (donde descarto que no tenga dolor en resto de áreas), una de las primeras hipótesis que surgen en mi cabeza es la posibilidad de un “dolor anterior de rodilla”. Cuando empiezo con el comportamiento 24 horas y le pregunto por las actividades que producen dolor o lo incrementan y me dice lo de la necesidad de mover las piernas cuando esta sentado, pienso en el “movie-goer’s sign” o “síndrome del espectador de cine” (así lo conozco yo), y pienso en una alteración femoro-patelar. Lo dejo “detrás en mi cabeza” y seguimos para bingo.<br /><br />Su dolor tiene un comportamiento muy “mecánico” y determinadas actividades, especialmente la carrera, incrementan su dolor hasta tener que abandonar la actividad. En el cuadro de componentes que pueden provocar dolor en su mapa corporal me equivoqué al poner L5 (tenía que haber puesto L3, pese a que una radiculopatía por encima de L4 no suele ser muy frecuente). También falta incluir Lx (lumbar) como posible fuente.<br /><br />En la inspección estática presenta características que me pueden hacer sospechar un mal reparto de presiones en la rótula y seguro condicionarán la dinámica. Tendencia a valgo de tobillo, rodilla, rotación interna de cadera. El recurvatum en rodillas quiero ver si tiene relación con una posible falta de dorsiflexión en tobillo, valorar la extensión de la cadera, la actividad de glúteo medio.<br /><br />Cuando comenzamos con las pruebas dinámicas efectivamente su marcha puede influir negativamente en su articulación patelofemoral. Tiene mal control motor a nivel de rodilla y cadera con una posible debilidad de glúteo medio. <br /><br />Realizo medición del posicionamiento de la rótula con una aparente lateralización de más de 2 centímetros. El tejido me ofrece resistencia al tratar de medializarla y por tanto con mi primera maniobra trato de “elastificar” ese tejido medializando la rótula hasta el final del rango de movimiento y permaneciendo cerca del final del recorrido (sin salir completamente) durante unos tres minutos. Dice notar una leve mejora en la sentadilla unipodal (un punto menos según EVA). Tras valorar debilidad en glúteo medio enseño ejercicio de activación y mejora el control motor en cadera pero no cambios en dolor. “Fijo” entonces con tape la rótula a medial (entended las comillas) y revaloro squat siendo ahora asintomático y con mejora en el control motor de la rodilla. <br /><br />Segunda sesión:<br /><br />Pregunto por cambios en el comportamiento 24 horas. No ha salido a correr (ha seguido mi recomendación) y dice que con el vendaje (se lo dejé puesto) nota menos molestias en las AVD. Valoro squat unipodal 4/10 y control motor en cadera mejor pero no en rodilla. <br /><br /><br />Screening test para incluir o excluir la cadera en el tratamiento. Negativo. Valoro relación lumbar. Negativo. Sigo con mi valoración. <br /><br />Realizo EMG para medir el timing vasto medial (VM)-vasto lateral (VL). Adjunto imagen del mismo (asi como imagen en miembro contralateral).<br /><br /><a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgId1XEesuikE88IaxuUT8l84I5Z324S3YJWL4KceLhWdgTkmuGo_hJWRgNRVSOqnsNpCX-Dw6PdGY4P3QX6fyZpF1fk-D-mLW9FPv-3cz3vXr-FiP63y868jqfgZAIbZjCdQoF/s1600/emg1.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 307px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgId1XEesuikE88IaxuUT8l84I5Z324S3YJWL4KceLhWdgTkmuGo_hJWRgNRVSOqnsNpCX-Dw6PdGY4P3QX6fyZpF1fk-D-mLW9FPv-3cz3vXr-FiP63y868jqfgZAIbZjCdQoF/s320/emg1.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5682596882578631490" /></a><br /><a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiB79LqQyfvJK4KQIK0sH1b8kIZ3K08h_meF0PLYYUC03H4xX_iN2t1zHM-XjCfac98dLStzdTzhxXwZOJlm_dmGHLWkqug7pKBSspMThWXxaqqv4kFy8KT5QrzlK8ggNy_IAFL/s1600/emg2.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 320px; height: 306px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiB79LqQyfvJK4KQIK0sH1b8kIZ3K08h_meF0PLYYUC03H4xX_iN2t1zHM-XjCfac98dLStzdTzhxXwZOJlm_dmGHLWkqug7pKBSspMThWXxaqqv4kFy8KT5QrzlK8ggNy_IAFL/s320/emg2.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5682596887145837602" /></a><br /><br />Se observa un leve retraso en la activación del vasto medial con una disminución de la cantidad de activación respecto al vasto lateral aunque el tiempo de contracción es similar en ambos canales. Con el EMG conectado buscamos un gesto que provoque más activación en vasto medial. El squat unipodal resulta doloroso por lo que pongo tape para medializar la rótula y reintentamos squat unipodal de manera indolora. Añadimos supinación del pie y empuje con cadera contralateral (rotación externa) para mantener una contracción de aductores ipsilateral evitando la rotación de cadera. En ese gesto hay más activación de VM respecto a VL, por lo que se le pauta para trabajarlo en casa.<br /><br />A la palpación dolor en PG1 y PG2 de vasto medial. Tratamiento con punción seca y estiramiento post-punción. En prono valoración posición de cuatro y tratamiento “elastificar” estructuras anterior de cadera. Valoración activación glúteo mayor. Trabajo control motor.<br /><br />Dejamos para la tercera sesión el estudio de la mecánica de carrera. Según evolución comenzaremos a planificar actividad deportiva. Refuerzo explicación día anterior (hablamos de carga y capacidad de carga, de las “twin peaks” de “Explain Pain”...) y recuerdo pauta autotratamiento. Próxima cita la semana que viene (con equipamiento deportivo inclusive).<br /><br />Y hasta aquí puedo leer (de momento). Estoy completamente abierto a críticas y lapidaciones públicas. ¿Hay algo que hubieras/no hubieras hecho? ¡Manifestaos, oh bienaventurados comentaristas!<br /><br />¡Un abrazote!<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com21tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-27778914590788436632011-12-02T18:08:00.002+01:002011-12-02T18:13:20.985+01:00Historia clínica (o desafío 2.0 aceptado)<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg0SoPd7r5UFYul021mvRpr_srXz4yuJgXABwu2HOvzeBTGYHrI8HwvCK8-tGIoYi-JOccADUEJNZN6HRcj30BLKcXzPhBq8Wz47sH3Y4WkvVF2rmBPiINaKWtyyYSfaQAD0cDT/s1600/Captura+de+pantalla+2011-12-02+a+las+18.03.17.png"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 400px; height: 278px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg0SoPd7r5UFYul021mvRpr_srXz4yuJgXABwu2HOvzeBTGYHrI8HwvCK8-tGIoYi-JOccADUEJNZN6HRcj30BLKcXzPhBq8Wz47sH3Y4WkvVF2rmBPiINaKWtyyYSfaQAD0cDT/s400/Captura+de+pantalla+2011-12-02+a+las+18.03.17.png" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5681577906631688546" /></a><br />Señores, me uno (o inicio... con esto del 2.0 no se si hablar en presente o en pasado porque pasan muchas cosas al mismo tiempo) a la propuesta de subir nuestras historias al blog. El propósito es comprobar lo que proponía “anónimo” acerca de la falta de consenso en esta entrada del <a href="http://osteonfisioterapia.blogspot.com/2011/11/opinar-sobre-la-osteopatia.html">blog de Carlos López Cubas</a>. Cito textualmente:<br /><br />“¿Te atreverías a dejar por escrito tu valoración y tratamiento de un paciente concreto para que lo viera otro colega y lo comentase según su punto de vista? ¿Crees que alguien estaría de acuerdo contigo o cada fisioterapeuta haría algo distinto para el mismo paciente?”.<br /><br />Os cuelgo una historia de un paciente que ha venido esta mañana. No digo nada. Me gustaría que en los comentarios habláramos al respecto. Quien no entienda la letra, que pregunte. Quien no entienda algo, no este de acuerdo, o simplemente tenga cualquier cosa que decir, que comente.<br /><br /><a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhmO0H5j_OHbKDGobZO5WD9fDZbDvZaCCT0JMCH3qwDN73285U2tSOGthMaa1b7zxEkGg7omqovu3Sj-xdAU2zdK9F3q58IMEQb536esOgYfThxeXJhgyPQQ9zMs-l458PPVn0D/s1600/1.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 146px; height: 200px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhmO0H5j_OHbKDGobZO5WD9fDZbDvZaCCT0JMCH3qwDN73285U2tSOGthMaa1b7zxEkGg7omqovu3Sj-xdAU2zdK9F3q58IMEQb536esOgYfThxeXJhgyPQQ9zMs-l458PPVn0D/s200/1.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5681579884379112722" /></a><br /><a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjL4eQU4eNZcDxr8l7ncAmAv54VguYlaeY2FVes-p7Chx46ifWr4ZZUiKDYuOsnAxjwHKy_a6CLNwEPjHZBexpCZduy3rbP5M1yWSduYeAhMhmJd3wJEO0d821nqQzFV56r9898/s1600/2.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 144px; height: 200px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjL4eQU4eNZcDxr8l7ncAmAv54VguYlaeY2FVes-p7Chx46ifWr4ZZUiKDYuOsnAxjwHKy_a6CLNwEPjHZBexpCZduy3rbP5M1yWSduYeAhMhmJd3wJEO0d821nqQzFV56r9898/s200/2.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5681579891345017250" /></a><div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com12tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-75451417983647151432011-12-01T14:05:00.003+01:002011-12-02T08:35:05.343+01:00Primer desafío cumplido<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhUguvWmX_nTelqeDF42SezeuM8415XP4y1yxuyHIn0MppgE9QmEiJN3x4mB8SXv1dScZnbQ9K5TiK7j6qe0_xZiVM3sK0g3GIAjQy4sD2xnHQcSdhjLUbzev1-w3CdfiPF7c1Y/s1600/la+foto.JPG"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 400px; height: 299px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhUguvWmX_nTelqeDF42SezeuM8415XP4y1yxuyHIn0MppgE9QmEiJN3x4mB8SXv1dScZnbQ9K5TiK7j6qe0_xZiVM3sK0g3GIAjQy4sD2xnHQcSdhjLUbzev1-w3CdfiPF7c1Y/s400/la+foto.JPG" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5681146474777358290" /></a><br /><br />Quiero narrar la evolución de un proyecto que comenzó hace ocho meses. Para entonces ya habíamos puesto en marcha en nuestras instalaciones, dentro del complejo deportivo municipal Abastos, un programa de fisioterapia acuática donde creamos un grupo para pacientes con dolor de larga evolución. Los grupos son reducidos y previamente y de manera individual cada participante, después de la valoración y cumplidos los criterios de inclusión, comenzaba a realizar actividades muy suaves en el agua bajo supervisión y con una constante enseñanza en conceptos básicos relacionados con el dolor. Buscábamos que el paciente fuera consciente de qué es lo que le pasa, a qué se debe su situación y de qué manera puede influir en ello.<br /><br />Como comenzamos con un grupo de “prueba”, fuimos aplicando lo que íbamos aprendiendo en cursos, leyendo en artículos e incorporando de nuestra propia cosecha en base a lo que nos dictaba la lógica. Así pues, cuando las actividades en la piscina fueron cada vez más “largas” (la gente aguantaba cada vez más tiempo, habituación), probamos a añadir actividades fuera de la piscina. Al principio eran pequeños paseos, que poco a poco iban alargándose, siempre teniendo presente la distracción como herramienta fundamental en nuestra progresión. Las rutas siempre incluían lugares con mucha saturación de estímulos visuales, auditivos, olfativos... el mercado central de Valencia pasó a ser parte de nuestro escenario “terapéutico” habitual.<br /><br />Los paseos comenzaron a convertirse en “marchas” donde, con algunas pacientes, además de caminar dedicábamos un rato a trotar a un ritmo muy suave. Y así fue que cada vez nos exigíamos más lo unos y los otros. Habían momentos emocionantes donde el girar la cabeza atrás y observar en primera persona los progresos conseguidos suponían una fuerte dosis de motivación. Otros en los cuales la sensación de “mi cuerpo no da más de sí” era tan habituales que las salidas se convertían en una verdadera cuesta arriba difícil de vencer. ¿Estaba exigiendo demasiado?<br /> Torear desde la barrera es muy fácil. En España todos sabemos de todo y cualquiera podría dirigir al Real Madrid o el Barcelona, gobernar este país o cualquier otra cosa que nos planteemos (parafraseando a Leónidas... “¡¡¡Esto es España!!!”). Así que me planteé poner en práctica la teoría aprendida en mi mismo. Comencé a correr con la intención de realizar el 100 k, un ultramaratón de montaña. Y como todo tiene un proceso, la primera prueba de fuego vino el 27 de noviembre de 2011 con la maratón de Valencia. Por lo que contaban mis pacientes corredores, los últimos diez kilómetros no entienden de “cuerpo”, porque las piernas hace unos cuantos kilómetros que dejaron de responder. Ahí comienza la lucha interna del “yo puedo”. No quiero imaginar qué sucede en el kilómetro 83...<br /><br />Y así se inició el reto de cero a cien del que ya hablé en una entrada. Y a ese desafío se sumó Nuria, que pese a la etiqueta limitadora que portaba en su expediente, se atrevió a plantarle cara a 10 preciosos kilómetro por Valencia paralelos a la maratón el mismo 27 de noviembre de 2011. Creo que puedo contar nuestra peripecia en nombre de los dos porque pasamos por algo parecido.<br /><br />Los primeros veinte kilómetros fueron cómodos porque es la distancia a la que estoy acostumbrado, es lo que más he entrenado. El problema vino cuando pasé el 27. He de reconocer que el entrenamiento decayó después de julio y mi constancia a la hora de entrenar ha dejado mucho que desear. Me enfrentaba a una situación novedosa y era consciente que iba a pasarme factura. Dolor en los vastos mediales de ambas piernas. Sensación de rampa. Esperaba el “hasta aquí hemos llegado” porque con cada zancada iba agudizándose. Parece que en el 29 el dolor se “estabiliza”. Me dificulta correr. Me apetece caminar pero soy consciente que después volver a correr iba a ser algo prácticamente imposible. En el 35 el dolor aprieta más y en el 39 voy apretando los dientes porque comienza a hacerme plantearme hasta dónde voy a poder aguantar. Me rió pensando en la carrera de los 100 k... y entonces aparece la gente. ¡Cuanta gente! Animando, vitoreando, gritando tu nombre, corriendo a tu lado... y aprieto no solo los dientes, también el ritmo. Sin darme cuenta estoy cerca del 41 donde me espera mi familia. Mi novia, mi madre, mi hermana, mis suegros, padres de mi cuñado... todos gritando. Me emociono. Subo la intensidad y me acerco a los últimos metros. Bajo al río. Increíble la cantidad de gente animando. Veo a amigos fisio, pacientes, Nuria con su novio animando. Me crezco. Subo más la intensidad y empiezo a cruzar la pasarela habilitada sobre el “lago” en la Ciudad de las Ciencias. ¡Menudo espectáculo! Cruzo el arco de meta, satisfecho y dolorido y me dispongo a caminar hacia el guardarropa. ¿Caminar? Mis piernas son dos bloques de hormigón. Me desplazo, pero eso, caminar, no es exactamente caminar.<br /><br />Esa tarde y el día de después quedan en lo puramente anecdótico, pero la experiencia sumamente gratificante. Más el saber que Nuria entró dentro del tiempo que concedía la organización para finalizar el 10 k. Su “calvario” se inició en el 8, pero no cesó en el empeño y alcanzó la meta. Al día siguiente agujetas pero nada raro. Ella ha aprendido a ignorar lo irrelevante. Ya no hay alarmismo y su cerebro es cauto a la hora de encender las alarmas. Hace deporte tres días por semana cuando antes apenas podía dar un paseo largo. Hemos cumplido el objetivo y entiendo un poco mejor por dónde ha pasado (salvando las distancias obviamente, se trata de una metáfora que nada tiene que ver con su realidad).<br /><br />¡Mi más sincera enhorabuena y muchísimas gracias por lo que he aprendido y disfrutado de la experiencia!<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com8tag:blogger.com,1999:blog-32317254.post-87546222529673953982011-12-01T10:13:00.003+01:002011-12-01T10:21:30.415+01:00Sobre osteopatía (o la novia fea...)<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhS4zRLuQC18ZzVjk9YIpx-PKKjc8buSw3Ez-oupbROHqNmdKF7pxSkTei2tq0slvgIrU82GFCAd0pL7e_Qc3E6Hrhel9RYSBuUMrt6-meq21xg7Qs_jP5zgA2TcU1hI2iRRrmg/s1600/oldfhasioned.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 226px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhS4zRLuQC18ZzVjk9YIpx-PKKjc8buSw3Ez-oupbROHqNmdKF7pxSkTei2tq0slvgIrU82GFCAd0pL7e_Qc3E6Hrhel9RYSBuUMrt6-meq21xg7Qs_jP5zgA2TcU1hI2iRRrmg/s320/oldfhasioned.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5681086544683441234" /></a><br />He estado leyendo unas cuantas entradas de compañeros blogers respecto a la osteopatía y me ha apetecido aportar algo de mi cosecha de manera breve y superficial (y polémica, claro...).<br /><br />Siempre que “debatimos” al respecto a quien salta porque se siente ofendido y me parece lógico y normal. Es importante recalcar que cuando hablamos de osteopatía no se pretende hacer una crítica al fisioterapeuta que ha invertido mucho tiempo y dinero es formarse para seguir creciendo como profesional. Hay que respetar los gustos y creencias de cada uno mientras éstas no resulten ofensivas para los demás. Pero insisto, entiendo que esto siempre se lleva al terreno de lo personal. Para mi, la osteopatía hoy es la novia “fea” del fisioterapeuta. Permitidme que lo exponga.<br /><br />Hace ya mucho tiempo uno de los amigos de la “pandilla”, cansado de nuestras “niñerías” emprendió un nuevo camino intentando llenar ese vacío que la amistad no era capaz de ofrecerle y se buscó una novia. Una novia resultona novia que le complementaba y le hacía sentir más hombre. Se encontraba más completo gracias a ella. Y lógicamente dejó de venir con nosotros porque para entonces no se sentía identificado con el resto del grupo.<br /><br />Con el tiempo el resto de miembros de la pandilla fuimos haciendo nuestras vidas sin perder el contacto. Nos fuimos casando y en todas las bodas siempre estaba la mesa de “la pandilla”, juntos. <br /><br />¿Os acordáis de las series de televisión de los 70-80? Pues así quedó la novia del primero que se fue de la pandilla. Con calentadores, pelo cardado y ropa ancha y floreada. ¿Desfasada? Y claro, cuando alguna vez hemos quedado con este amigo y alguno le ha dicho que su novia, antaño resultona, ahora era “hortera”, “anticuada” o directamente “fea”, pues éste se ofende.<br /><br />Ahora un poco más en serio, no creo que la “osteopatía” y pongo el entrecomillado para resaltar que hablo de la osteopatía desde un marco conceptual puramente teórico, sea algo del pasado, pero sí creo que sus principios teóricos, su base de sustentación tiene poca cabida en el ámbito científico sanitario actual. <br /><br />Yo personalmente creo que mezclar agua y aceite supone intentar juntar dos elementos que van por separado en un mismo contenedor. Lo mismo sucede con la fisioterapia y la osteopatía. Se pretende unir algo que no tiene punto de unión, porque el principio del que parte la osteopatía no tiene nada que ver con el marco teórico en el que se debe desarrollarse la fisioterapia.<br /><br />Creo que en el pasado la una se benefició de la otra y viceversa, en nuestra historia particular, en España. También creo que a la osteopatía le interesa seguir vinculada a la fisioterapia española por el mercado que le ofrece y el amparo universitario, pero que actualmente a la fisioterapia la osteopatía no le beneficia en absoluto.<br /><br />Detrás de todo esto, más allá de una lucha de bandas lo que hay es un interés económico muy grande. La osteopatía ha conseguido infiltrarse en el programa de grado de fisioterapia en la mayoría de universidades y se confunde al formando introduciéndole conceptos tales como “terapia manual osteopática” y “maninpulación osteopática” que le dan a entender que la única terapia manual que existe es la que “inventó” la osteopatía.<br /><br />Por tanto, entiendo que el fisioterapeuta que se ha formado en osteopatía se sienta ofendido cuando insultan a su novia, pero éste debe entender que esto sucede porque para los demás, su novia es fea. O si lo prefieren, su novia no es guapa. O no nos resulta agradable a la vista. <br /><br />Me quedo con un comentario anónimo del blog <a href="http://fisioaso.blogspot.com/2011/11/osteopatia-y-fisioterapia-o.html">Fisioterapia y Salud-os</a> respecto a la “ciencia basada en la evidencia” y el amparo que se hace de ella para justificar tratamientos tales como la terapia craneosacra y la manipulación visceral:<br /><br />Anónimo dijo...<br />La medicina basada en la evidencia tiene estas cosas. Se llama ciencia a cualquier idiotez. Es posible que muchos conozcáis la revisión Cochrane sobre el rezo intercesor (lo eficaz que es rezar por otro para que se cure). La evidencia es ciega. Últimamente hay interés, por ejemplo, en la utilización del TENS en el tibial posterior para tratar la incontinencia fecal. Se puede estudiar cualquier cosa: el padrenuestro frente al avemaría para el intestino irritable, la eficacia de contemplar atardeceres como tratamiento de la hepatitis crónica o dar palmadas como tratamiento del estrés. La evidencia es tonta. Por eso muchos tontos se apuntan a la evidencia, investigan tonterías y creen que hacen ciencia. Pero la ciencia es otra cosa. Puede haber Osteopatía basada en la evidencia pero nunca habrá Osteopatía basada en la ciencia.<div class="blogger-post-footer">Las inquietudes de un fisioterapeuta... en fin, el "diario de un fisio".</div>villovihttp://www.blogger.com/profile/04781151637187408348noreply@blogger.com7