miércoles, noviembre 04, 2009

Vacunas para el movimiento


En los últimos tiempos, en el campo de la investigación en fisioterapia, se está hablando más de neurofisiología y "menos" de biomecánica. Se busca el mecanismo fisiológico subyacente a la aplicación de X técnica, especialmente, su relación con el programa de dolor.

Desde una perspectiva más simplista, podríamos entender que nuestro campo de actuación (la fisioterapia) se centra en el movimiento y la relación que este tiene con los programas de dolor. Dentro de la respuesta de daño, existe una inhibición motora, con la finalidad de "acotar" el daño y "facilitar" su reparación.

En la alerta nociceptiva también encontramos una inhibición motora. Ahora no necesariamente tenemos daño y por tanto no hay una activación de los procesos de "curación-regeneración", pero la orden de inhibición motora es la misma.

Y cuando hablamos de inhibición motora no es que seamos completamente incapaces de mover X estructura. Lo que sucede es que el "fino" patrón de control motor se ve alterado. Entran en juego compensaciones, adaptaciones, hipomovilidades, hipermovilidades...

Es parte de nuestro trabajo reeducar el movimiento. Corregir las alteraciones, reentrenar musculatura, activar, inhibir... Intentamos facilitar el patrón motor SIN DOLOR. Mejoramos la calidad y la cantidad de movimiento. Le "demostramos" a ese cerebro en alerta (sensibilizado?) que no hay por qué alarmarse. El agente ante el que se defiende no es tan nocivo como había previsto. Posiblemente ha habido una confusión, una mala interpretación de algo potencialmente amenzador y parece que no es tanto...

"Inyectamos" pequeñas cantidades de agente nocivo para "desensibilizar" un sistema hipervigilante. "Vacunamos" al cuerpo con el mismo agente ante el que se defiende: el movimiento.

7 comentarios:

Blogger Arturo Goicoechea ha dicho...

Me gusta comparar el cuerpo con un instrumento musical que el individuo intenta hacer sonar. Hay malas técnicas de ejecución que generalmente asocian una mala calidad musical con la aparición de dolor y distonías. La terapia exige una reprogramación dirigida a conseguir tanto la calidad musical como la corrección del dolor. El proceso exige un buen profesor de ejecución del instrumento. Su labor incluye tanto correciones de ejecución motora como de imaginación y eliminación del miedo al fallo (equivalente al daño).

La desensibilización es efectivamente eso que describes y puede ser comparada a la aplicación de vacunas. Sólo que en las vacunas lo hacen todo el alergólogo, el antígeno y el sistema inmune. En los neuroantígenos se requiere la colaboración del tutor y el alumno

9:30 a. m.  
Blogger villovi ha dicho...

Gracias por el apunte. Son "vacunas activas" para el movimiento. Necesitan la implicación del paciente, tanto en la "terapia física" como en la "pedagogía".

Un saludo.

11:04 a. m.  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Me gusta la palabra: neuroantígeno.

Aplicada al campo de fisioterapia, me hace relfexionar tu entrada, Villovi, un poco al hilo de las relfexiones del Dr. Arturo.

El cerebro previene al cuerpo del movimiento, le hace desisitr del mismo y para ello activa el programa dolor. ¿Es la hipocinesia la respuesta del cerebro? ¿es por ello que los músculos están programados para tan poca actividad, por eso se fatigan y lesionan y duelen?

Es posible. Nuestro programa motor se ha ido empobreciendo en las últimas generaciones por imperativos culturales-sociales, con respecto al programa inicial que filogenéticamente hemos ido desarrollando durante millones de años de evolución.

Pensemos... ¿qué programa motor nos permitimos los humanos medios de las sociedades industriales postmodernas? Uno muy pobre.

Nuestro rictus facial es constante todo el día: no nos permitimos ni muecas, ni gesticular, ni expresar nuestras emociones; en la silla, nuestro patrón motor se reduce a cruzar una pierna por encima de la otra.

¿Hace cuanto que no nos desperezamos?

Por imperativos sociales, culturales, hemos diseñado un programa motor basado en la hipocinesia o quizá mejor dicho, en la pobreza gestual, de movimiento.
En este sentido me encajan las palabras del Dr. Arturo y las correlaciono con la clínica: nuestro cerebro ha aprendido a defendernos del movimiento. El programa dolor, no es más que la punta de lanza de esa defensa: de ahí contracturas, caídas de unmbrales de dolor, rigideces, factores de perpetuación de PGMs...

"Vacunas activas de movimiento, en pqueñas dosis y controladas, para desaprender lo aprendido (hipocinesia) y volver a aprender (aumentar los registros del programa motor)"

Excelente y muy brillante entrada, Villovi!

4:37 p. m.  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Hola Hola!!! me llamo Miriam y tngo 19 años, mira e kaido aki de casualidad... y la verdad me atrae muxo esto de la fisioterapia y al = k tu ... empezo la cosa x gustarme la educacion fisika y dsps ir investigando y concluyendo ke definitivamente lo k m agrada y m agradaba era la fisioterapia...eleccion mia ya dsd los 14 -15 años.
La cosa esta en k yo no aprobe la selectividad ste año y repeti el 2n d batxillerato tontamente alo k ahora estoy haciendo ciclos formativos de grado superior de higiene bucodental k es de un año para el prox año acceder a la fisioterapia.

La verdad tengo un monton de preguntas k me gustaría hacerle x pura curiosidad asi ke le dejo mi msn-hotmail.

miry_rubia_90@hotmail.com

una de las cosas ke me interesaría tb es saber si esta informado sobre si se puede estudiar esta carrera por internet desde el estranjero, o si sabe alguna cosa relacionada con estos temas digamelo.

Es ke me gustaría estudiar una carrera fuera aunk sinceramente parto d una base mu basika tanto en ingles como en frances, en un principio me gustaria ir a Canada - Montreal ke es donde tengo familia alli k tb saben hblr español.
Sino como segunda opcion escojeria South Carolina dónde tengo algunas amistades.

Ya me comenta algo ;)

11:57 a. m.  
Blogger Unknown ha dicho...

Al respecto del movimiento como vacuna, sería injusto dejar de citar la idea del "movimiento como antígeno" que lleva defendiendo Mick Thacker desde hace un par de años.

En el último NOInotes del NOIgroup http://noinotes.blogspot.com/2009/10/noi-notes-on-movement-as-antigen.html
David Butler desarrolla una entrevista con Mick en relación con el tema.

Me parece fascinante, aunque quizá algo complejo, pero era evidente el hecho de que el sistema inmune (y seguramente, en concreto, esa glia que durante tanto tiempo se ha tomado casi como relleno en las neuronas) cobraría vital importancia en el tema del dolor.

Un artículo bonito, Villovi!

11:30 p. m.  
Blogger villovi ha dicho...

Carlos muchas gracias por la información. Sinceramente estoy en "pañales" respecto al NOI Group. Lo poco que conozco de ellos me parece fascinante, asi que entraré en el enlace que adjuntas inmediatamente. Desconocía dicho concepto, pero es muy interesante que alguien lo haya desarrollado en profundidad.

Un saludo y gracias de nuevo.

11:18 a. m.  
Blogger Arturo Goicoechea ha dicho...

No acabo de comprender (o aceptar) la tesis de que el movimiento es un antígeno que activa el sistema inmune y la participación de la glía como intermediario.

Creo que no es necesaria esa participación en el tema que nos ocupa de dolor sin daño. Cuando hay necrosis, el sistema inmune y el nervioso actúan absolutamente integrados: sistema neuroinmune. Cuando se trata de una respuesta preventiva de alerta la red neuronal se sensibiliza por sí misma por facilitación descendente. El cerebro activa la sensibilización. No necesita la puesta en marcha del sistema inmune para que se produzca una facilitación nociceptiva.

Creo que el equivalente al alergeno (antígeno que induce al error) es el movimiento no necrotizante.

6:57 p. m.  

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